Las canas se asocian al envejecimiento, debido a que con el paso del tiempo se produce la pérdida de melanina, un aminoácido que se encuentra en la piel, el cerebro y en otras partes del cuerpo, explican desde la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV). Este es uno de los motivos de su aparición, pero también existen la creencia popular de que el estrés acelera la aparición de las canas.
Por suerte, una nuevo investigación defiende que este proceso se puede revertir. Según recoge la BBC, un estudio de la Universidad de Columbia publicado en la revista eLife, revela que cuando se elimina la fuente de estrés, el cabello puede retomar su color habitual.
Mundo Martin Picard, profesor de medicina del comportamiento del Vagellos College de Médicos y Cirujanos de la Universidad de Columbia, y coautor del estudio; explica a la BBC Mundo que "por décadas hemos tratado de entender la influencia del estrés en el proceso de la aparición de canas, y este es el primer estudio que demuestra una clara conexión entre el estrés psicológico y el cabello blanco".
Una vez que padecemos estrés, el cabello crece canoso perdiendo su color. Los investigadores analizaron cabellos individuales de diferentes partes del cuerpo de un grupo de personas de distintas edades, quienes debían apuntar sus días de mayor estrés.
Los jóvenes recuperaban el color después de pasar dos semanas de vacaciones. Esto quiere decir que eliminar el estrés favorece la vuelta del cabello original. Picard matiza que el cambio de color no se debe a que el pelo está fuera del folículo piloso, sino cuando "está creciendo dentro de esta suerte de miniórgano que se encuentra bajo la piel".
"El estrés psicológico afecta los procesos energéticos en la mitocondria –los orgánulos celulares que suministran la mayor parte de la energía para la actividad celular.–, y cuando la mitocondria no funciona bien, el cabello pierde pigmento", indica el investigador, "cuando se elimina la fuente de estrés, el cabello puede regresar y recuperar su color oscuro", añade.
A pesar de esto, el experto señala que si la persona lleva décadas con el cabello canoso, es muy difícil que vuelva su color, por lo que no todas personas que acaben con el estrés conseguirán el resultado.
Finalmente, Picard sostiene que el estudio les anima a seguir indagando qué otros procesos relacionados con el envejecimiento están influenciados por el estrés y cómo pueden ponerse remedio.
Cabe recordar que otros factores como la edad, la genética o padecer una enfermedad también producen la aparición de canas y no pueden revertirse. Sin embargo, aquellos cabellos blancos vinculados al estilo de vida, se puede frenar, ¿cómo? Además de huir del estrés, podemos destacar que una dieta rica en nutrientes y los hábitos de estilo de vida saludables deberían reducir la tasa de desprendimiento de cada cabello, permitiendo que la melanina que aporta color rubio, moreno, o pelirrojo dure por más años.
