Los consejos de la Policía para mantener segura tu casa en vacaciones

Las vacaciones son para relajarse. Estos días libres son una forma de desconectar de las preocupaciones y poder visitar otros rincones diferentes a nuestra ciudad habitual. Disfrutar de la montaña y la naturaleza, cruzar la frontera hacia otros países o hundir los pies en la arena de la playa son algunas de las opciones preferidas para estos días.

Sin embargo, no siempre es posible dejar atrás todas las preocupaciones cuando cerramos la puerta de nuestra casa durante unos días. Lo más habitual es que volvamos y encontremos todo igual, pero es normal sentir un poco de miedo por si alguien entrase a robar en nuestra ausencia.

Por eso, la Policía Nacional dispone de un Programa de Colectivos Ciudadanos. Entre sus líneas de actuación se encuentra el fomento de hábitos seguros que buscan prevenir los robos en casas y trasteros, también durante las vacaciones.

Cuidado con difundir tu ausencia

Hay algunos gestos y precauciones que pueden ayudarnos a irnos con una sensación de mayor seguridad. En general, lo más importante es que no parezca que nos hemos ido y, por si se diese el fatídico escenario, saber cómo actuar.

La primera precaución puede ser instalar una puerta de seguridad, un cerrojo o una alarma que alerte del peligro. También es importante no desconectar el timbre de la puerta, pues podría ser una señal de que no hay nadie en casa.

Otras señales de nuestra ausencia puede ser la acumulación de correspondencia en el buzón, si pasamos una temporada más larga fuera. Para no dar esa pista a los posibles delincuentes, podemos pedir a alguien de confianza que nos recoja las cartas.

No obstante, hay que tener cuidado con quién sabe que nos vamos. Lo más prudente es comunicarlo solamente a nuestro entorno de confianza, aunque, en la actualidad, somos menos precavidos en este aspecto: nuestras redes sociales están llenas de fotos veraneando en tiempo real.

No bajar del todo las persianas es otro gesto que puede ayudarnos a que un posible ladrón descarte nuestra casa. Si, a pesar de todo, no consigues irte con total tranquilidad, puedes valorar instalar un reloj programable que encienda y apague las luces por zonas en diferentes horarios para fingir que hay gente en casa.

Otra precaución importante es guardar todos los objetos de valor en una caja fuerte y hacer inventario de ellos junto a los números de serie. Además, si tienen alguna marca, será mucho más sencillo localizarlos en caso de que sean robados, pues muchas veces pueden encontrarse en el mercado de segunda mano.

Por último, si al volver a casa nos topamos con la puerta abierta o una ventana rota, debemos mantener la calma y actuar según recomiendan las autoridades. Lo más importante es no entrar y llamar a la Policía. Así, evitaremos tocar o mover nada del interior para no destruir posibles pruebas.