Cultura
Casi 40 artistas se unen para firmar 'Tributo a Sabina: Ni tan joven ni tan viejo'
Se trata de un gran homenaje al cantautor jienense con participación de Serrat, Amaral, Bunbury...
"Me niego a ser profeta de nadie y mucho menos de este gilipollas" me respondió Joaquín Sabina mientras Joan Manuel Serrat se partía de risa cuando les pregunté que les parecía la afirmación de un amigo que sostenía que "Serrat es dios y Sabina su profeta". Los dos grandes amigos estaban a punto de iniciar su gira con La orquesta del Titanic. "Los músicos del Titanic son una metáfora perfecta de dignidad ante la que está cayendo", comentó Serrat y sabina apostilló: "El mundo se hunde y nosotros salimos de gira". Su voz estaba, para muchos, más maravillosamente rota que nunca pero su fuerza y sus ganas eran las de siempre.
Pasaron los años, en 2018 le escuché cantar en el Olimpia de París y me llegó más que nunca al corazón a pesar que para el cantautor fue un año marcado por los problemas de salud y el abandono del escenario en directo. Desde entonces nos tiene un poco preocupados a sus millones de seguidores. No había más que escucharle cantar Lo niego todo para comprender que algo no va tan bien como debiera. Aquel año se embarcó en una gira con más de 80 conciertos por España, Europa y América y a sus 69 años se sometió a un esfuerzo físico y psíquico más que importante. Lo logró, con algún que otro contratiempo como la suspensión de A Coruña y demostró que el ictus, la operación de estómago y la ansiedad habían quedado atrás.
Pero todo se queda en la mochila, lo bueno y lo no tan bueno. Y en la mochila de Joaquín acaba de entrar Tributo a Sabina: Ni tan joven ni tan viejo un disco que de reciente publicación con casi cuarenta participantes en muchos casos dispares pero inequívocamente unidos por el cariño y el respeto a un artista realmente excepcional.
Ahí se han reunido Fito y Fitipaldis y Coque Malla para reinterpretar Ruido.
A Alejandro Sanz le ha tocado lucirse cantando Contigo.
Amaral y Manolo García cuentan que "no hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió" cuando cantan Con la frente marchita.
Bunbury versiona Donde habita el olvido, tema del mejor disco de toda la obra de Sabina, 19 días y 500 noches.
A su buen amigo, compañero de escenario y ex de Pereza, Leiva, le ha tocado versionar El caso de la rubia platino.
Los dos Pablos, Alborán y López interpretan Peces de ciudad.
La icónica Calle Melancolía y "cabalgar a lomos de una yegua sombría" es cosa de Robe Iniesta y La canción más hermosa del mundo es para Manuel Carrasco.
19 días y 500 noches la interpreta la joven y mucho más que prometedora artista madrileña Travis Birds con letra de Benjamín Prado.
Cerrado por derribo es el tema que reinterpretan Niño de Elche y Guitarricadelafuente.
Y sin embargo te quiero es la fantástica aportación al disco de la jienense Zahara y el ex Canto del Loco Dani Martín.
El cuasi hermano de Sabina, Serrat interpreta junto a Rozalén una preciosa versión de A la orilla de la chimenea, tema del también histórico álbum Física y Química.
Los imprescindibles Los Rodriguez, sin el tristemente desaparecido Julián Infante, se han vuelto a reunir para la ocasión y Andrés Calamaro, Ariel Rot y Germán Vilella reinterpretan el tema, que les va como anillo al dedo, Princesa.
Yo también sé jugarme la boca, es la aportación al álbum de la malagueña Vanesa Martín que canta "yo también sé jugarme la boca, yo también sé besar".
Amor se llama el juego está interpretada por Melendi.
Otro de los temas imprescindibles de Sabina, Quién me ha robado el mes de abril, es el que versiona Pablo López.
Una de las historias más canallas del maestro Sabina, Pacto entre caballeros, es la aportación al disco del dúo Estopa.
A mis cuarenta y diez está interpretada por M-Clan y Alejo Stivel que en su día produjo el fantástico 19 días y 500 noches en el que se incluía el tema.
Eclipse de mar es el tema que les ha tocado interpretar a Ismael Serrano y Funambulista.
Nos sobran los motivos está versionada por la portorriqueña Marwan y el madrileño Kany García.
La fundamental Lo niego todo está, estupendamente, reinterpretada por Mikel Erentxun y los madrileños Rufus T. Firefly.
El clásico Pongamos que hablo de Madrid lo cantan el ex Pereza Rubén Pozo y el ex La Cabra Mecánica Lichis.
Ganas de... es el terma que aportan Macaco y Carlos Sadness.
Una canción para la Magdalena esta cantada por Andrés Suárez con la colaboración de la poetisa Elvira Sastre.
Y nos dieron las diez, cantando por estrofas por los participantes en el disco, es el broche de oro de este álbum doble.
