En 2013, dos alemanes, Daniel Chun y Jan Derksen, crearon Conserve the sound, un portal web en el que se exponen, como si de un museo se trastase, sonidos característicos de objetos de uso común en el siglo XX. Acompañada de su correspondiente foto, los visitantes pueden comprobar como suena una máquina de escribir de los años 20 o recordar el rugido del Citröen 2CV (el famoso dos caballos).
La muestra expone piezas sonoras de objetos para todos los gustos y edades. Los amantes del cine pueden disfrutar del sonido de proyectores de la famosa cinta de 8 milímetros o de las mesas de rebobinado manual de los 50 y 60. También hay sitio para los curiosos de la fotografía: la exhibición virtual reproduce grabaciones de la obturación (disparo) de cámaras de los años 30 y 40 y, para los que fueron jóvenes en los 70 y 80, también contiene audios de las instantáneas polaroid, con las que Andy Warhol hizo sus famosos retratos.
Para los curiosos o amantes de lo vintage, el museo ofrece más de 100 sonidos diferentes. Así, podrán viajar en el tiempo y escuchar el crujido de los teléfonos de rueda, el ruido atronador de los primeros secadores de pelo, radiocassettes abriéndose, bolas Klick Klack chocando o máquinas de afeitar Braun Micro.
La muestra sonora se acompaña de entrevistas visuales (en alemán, con subtítulos en inglés) a personas de distintas edades, que recuerdan cuáles eran sus objetos preferidos y cómo sonaban. El proyecto, que ha sido financiado por el German Film und Medien NRW (una de las productoras más grandes del país), se nutre, en su mayoría, de piezas fotografiadas y grabadas propiedad de los fundadores o de sus amigos, pero también aceptan propuestas del público.
Además, Conserve the sound cuenta con redes sociales en las que suben fotografías y audios y reciben propuestas. Adjuntamos su cuenta de Instagram: