Ozempic, el popular medicamento antidiabético para adelgazar, podría tener más beneficios de los que se pensaba, y es que un reciente estudio ha descubierto que podría ayudar a prevenir enfermedades cardiovasculares, como el infarto.
El principio activo semaglutida que contiene este medicamento es lo que ayuda al cuerpo a reducir el nivel de azúcar en sangre cuando este está demasiado elevado, ayudando así a prevenir una enfermedad cardíaca, explican desde la web de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios. Por lo general, se utiliza en las personas mayores de 18 años con diabetes cuando la dieta y el ejercicio no son suficientes. Sin embargo, también ha destacado por sus propiedades adelgazantes, así como por sus problemas de desabastecimiento.
Ahora, un nuevo estudio publicado en la revista médica The New England Journal of Medicine, determina que este principio, la semaglutida, no solo reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares en pacientes con diabetes, también puede reducir el riesgo cardiovascular asociado con el sobrepeso y la obesidad en personas que no tienen diabetes.
Cada vez son más las investigaciones que se lleva a cabo para conocer más sobre este tipo de enfermedades. Por ejemplo, un estudio de la Universidad Técnica de Múnich (Alemania) señala que las células grasas del cuerpo aumentan de tamaño cuando ganamos peso, por lo que en las personas obesas, esas células grasas aumentan mucho de tamaño, lo cual puede provocar enfermedades metabólicas. También tienen un mayor riesgo de sufrir enfermedades secundarias, como diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y diversos cánceres.
Otro estudio de la Universidad de Gotemburgo (Suecia), publicado en la revista científica The Lancet, destacaba que los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares son, en gran medida, los mismos para hombres y mujeres, según un amplio estudio mundial en el que participan investigadores de la Universidad de Gotemburgo (Suecia).
En este nuevo estudio, los investigadores llevaron a cabo un ensayo, en el que participaron un total de 17.604 pacientes mayores de 45 años que tenían enfermedades cardiovasculares preexistentes y un índice de masa corporal de 27 o más, pero sin tener diabetes. De todos ellos, a 8.803 se les dio semaglutida, mientras que a los restantes 8.801 se les dio placebo.
De esta forma, tras los 39,8 meses que duró el estudio y el seguimiento de los pacientes, los investigadores detectaron "un evento cardiovascular primario en 569 de los 8803 pacientes (6,5%) del grupo de semaglutida y en 701 de los 8801 pacientes (8,0%) del grupo de placebo", explican en el estudio.
Ante estos resultados, los investigadores concluyeron que "en pacientes con enfermedad cardiovascular preexistente y sobrepeso u obesidad pero sin diabetes, la semaglutida subcutánea semanal en dosis de 2,4 mg fue superior al placebo para reducir la incidencia de muerte por causas cardiovasculares, infarto de miocardio no mortal o accidente cerebrovascular no mortal", señalan.
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.