El sistema de iluminación de nuestro vehículo es considerado uno de los elementos vitales para garantizar la seguridad en la vía. Esto se debe a que ver y ser vistos correctamente durante la conducción es indispensable. Por ello, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha recordado a través de Twitter lo importante que es hacer un buen uso de las luces dirigiéndose, principalmente, a los vehículos más antiguos.
Esto tiene que ver con el avance del alumbrado en los vehículos desde sus inicios: lo que comenzó con lámparas de aceite adoptadas del sistema que llevaban los carruajes, hasta las luces LED inteligentes, pasando por muchas derivaciones –como los faros de xenón–. Actualmente, todos los vehículos comercializados a partir del 2011 tienen la obligación de llevar incorporadas las luces de circulación diurna. Este tipo de luces se encienden automáticamente en el momento que arrancamos el coche y su objetivo es mejorar la visibilidad durante el día, para ser vistos mejor y con mayor antelación. Además, son luces de bajo consumo y que no interfieren en la eficacia del turismo.
Sin embargo, los vehículos comercializados anteriormente a esa fecha, no disponen de ellas. Esto supone un peligro en la carretera, más aún cuando muchos conductores se muestran reticentes a la hora de encender las luces de corto alcance. Es por esto que la DGT ha lanzado este mensaje a través de su cuenta de Twitter: los coches sin luces diurnas deben llevarlas encendidas durante todo el día.
Además, Tráfico también hace un llamamiento a quienes tienen luces diurnas, recordándoles cuándo deben encender la luz de cruce: en túneles, en carriles especiales y cuando haya escasa visibilidad. La DGT asegura que si lleváramos la luz de cruce encendida por el día se reducirían hasta un 10% las muertes por accidentes. De ahí que todos los años, al comienzo de los meses de verano y de invierno, desde la revista DGT nos recuerden que “mejor con las luces encendidas” y que es completamente legal llevarlas a cualquier hora.
En los países nórdicos es obligatorio el encendido las luces de corto alcance durante todo el día, al margen de cualquier condición climática. Aunque en España tenemos muchas horas de luz solar y buen clima, esto también es perjudicial al principio y al final del día, debido a que, a consecuencia de la falta de visibilidad causada por el sol, se incrementa notablemente el número de accidentes durante estas horas.
El peligro de las luces automáticas
El avance de los sistemas tecnológicos en los vehículos puede suponer un problema al dejarlo todo en sus manos. Esto ocurre con cualquier aparato electrónico: ya puede ser el calendario de nuestro teléfono que nos recuerda las citas pendientes o cuando mandamos al televisor que se apague automáticamente a X hora.
Lo mismo sucede con las luces de nuestro vehículo. Muchos turismos modernos llevan incorporados este sistema de encendido automático, el cual está pensado para que en el caso de que tuviéramos algún despiste, funcione igualmente. Este sistema aporta muchas ventajas, al fin y al cabo, están diseñados para ayudarnos en la conducción.
Sin embargo, ahora no hablamos de una alerta en el móvil o de una televisión, sino de la seguridad vial, por lo que debemos tener presente que el sistema automático de luces puede generar un inconveniente: desentendernos de todo. Muchas veces este tipo de luces no son del todo precisas y pueden no encenderse en algunas situaciones como, por ejemplo, en los túneles. También en determinados momentos puede fallar el sensor de lluvia o que no se desactive la luz de carretera y, por consiguiente, podamos deslumbrar a otro vehículo. Si sucediera algo así, además de los posibles accidentes que puedan acarrear estos problemas, también nos enfrentamos a una multa de 200 euros. Por ello, siempre es importante poner el máximo de atención en la conducción, contemos o no con sistema automático.