Juan María León
Sociedad
Los días que nunca existieron: del 5 al 14 de octubre de 1582
El cambio al Calendario Gregoriano provocó que estos días desaparecieran
Hace 441 años se realizó el cambio del calendario juliano al calendario gregoriano. El 4 de octubre de 1582 se realizó este cambio, pero en vez de pasar al 5 de octubre, se paso directamente al 15 de ese mes, provocando que nueve días desaparecieran del calendario.
Esta reforma de calendario se realizó como consecuencia de uno de los acuerdos del Concilio de Trento. Se decidió ajustar el calendario para eliminar el desfase producido en el primer Concilio de Nicea, celebrado en el año 325, para que este se hubiera celebrado en Pascua. Las reformas vinieron impulsadas por Gregorio XIII.
Lo importante en aquel momento era mantener y regular el calendario religioso, aunque eso significara realizar cambios en el calendario civil. En el Concilio de Nicea se determinó que la Pascua debía conmemorarse el domingo siguiente al plenilunio posterior al equinoccio de primavera en el hemisferio norte (equinoccio de otoño en el hemisferio sur). Aquel año 325 el equinoccio había ocurrido el día 21 de marzo, pero con el paso del tiempo la fecha del acontecimiento se había ido adelantando hasta el punto de que, en 1582, el desfase era ya de 10 días, y el equinoccio se fechó el 11 de marzo.
El desfase provenía de un inexacto cómputo del número de días con que cuenta el año trópico; según el calendario juliano que instituyó un año bisiesto cada cuatro, consideraba que el año trópico estaba constituido por 365,25 días, mientras que la cifra correcta es de 365,242189, o lo que es lo mismo, 365 días, 5 horas, 48 minutos y 45,16 segundos. Esos más de 11 minutos contados adicionalmente a cada año habían supuesto en los 1257 años que mediaban entre 325 y 1582 un error acumulado de aproximadamente 10 días, según Wikipedia.
El calendario gregoriano, impulsado fundamentalmente por el jesuita alemán Christopher Clavius, ajusta este desfase cambiando la regla general del bisiesto cada cuatro años, y hace que se exceptúen los años múltiplos de 100, excepción que a su vez tenía otra excepción, la de los años múltiplos de 400, que sí eran bisiestos.
La nueva norma de los años bisiestos se formuló del siguiente modo: la duración básica del año es de 365 días; pero serán bisiestos (es decir tendrán 366 días) aquellos años cuyas dos últimas cifras son divisibles por 4, exceptuando los múltiplos de 100 (1700, 1800, 1900..., que no serán bisiestos), de los que se exceptúan a su vez aquellos que también sean divisibles por 400 (1600, 2000, 2400..., que serán bisiestos). Este sistema sigue rigiendo en la actualidad. Así, el año 2000 fue bisiesto, pero 2100 no lo será.
El calendario gregoriano entró en vigor de inmediato en la Europa católica. Las zonas protestantes no lo hicieron hasta 1700, Gran Bretaña hasta 1753, Japón en 1873 y Rusia convertida ya en Unión Soviética en 1918.