Sociedad

Qué diferencia hay entre bronquitis y bronquiolitis

Paula Buedo

Foto: Big Stock

Domingo 25 de diciembre de 2022

ACTUALIZADO : Domingo 25 de diciembre de 2022 a las 10:23 H

4 minutos

Ambas enfermedades son comunes en invierno

Qué diferencia hay entre bronquitis y bronquiolitis
Paula Buedo

Foto: Big Stock

Domingo 25 de diciembre de 2022

4 minutos

Toses, estornudos, congestión nasal… Es raro no caer enfermo en estas fechas. La llegada del frío invernal hace que las enfermedades víricas se propaguen a mayor velocidad. A pesar de que estos episodios de resfriados, gripes y catarros variados se producen cada año, no siempre somos capaces de distinguir si nos hemos infectado con un virus o con otro.

Algunas enfermedades, además, tienen nombres muy parecidos. Este es el caso de la bronquitis y la bronquiolitis, dos afecciones comunes en invierno que afectan a las vías respiratorias y producen, como síntoma más evidente, una tos persistente y molesta. Apenas unas letras las diferencian nominalmente, pero lo cierto es que son muy distintas y no afectan a las mismas personas.

 

Estas son las principales diferencias

La bronquitis es un diagnóstico muy común en estas fechas. Se trata de una infección, generalmente vírica, que produce tos. De sufrirla, las medidas que se recetan son, en general, para aliviar los síntomas y hacer el proceso de curación más llevadero. Normalmente, no es una enfermedad de gravedad y se asocia a los catarros habituales.

La bronquiolitis es también una enfermedad vírica del sistema respiratorio. Sin embargo, mientras cualquiera puede enfermar de bronquitis, normalmente la bronquiolitis se da en lactantes de muy temprana edad, aunque también puede darse en adultos. Es la primera causa de hospitalización en estos niños recién nacidos, pues sus vías aéreas se obstruyen y se dificulta la respiración.

En el caso de la bronquitis, no hay un tratamiento diseñado específicamente para ella. En la mayoría de las situaciones, se recomienda beber mucho líquido, usar suero fisiológico para destapar la nariz y, si hubiese episodios de fiebre, utilizar fármacos antitérmicos. Los síntomas pueden perdurar durante alrededor de dos semanas.

Para los niños afectados por bronquiolitis, hay que añadir a esa lista de medidas de soporte el control de la oxigenación y la recomendación de mantener una postura ligeramente incorporada, pues muchos se quejarán al tumbarse al notar que respiran peor. La Sociedad Española de Pediatría de Atención Primaria solo recomienda el uso de broncodilatadores inhalados en algunos casos específicos. En general, es una enfermedad que no suele ser grave, pero en ocasiones puede requerir hospitalización, especialmente si el niño enfermo es muy pequeño o la familia es fumadora.

La diferencia fundamental, por tanto, además de que los más afectados por bronquiolitis sean niños de muy corta edad, es el área del sistema respiratorio que enferma. En el caso de la bronquiolitis, afecta a las ramas más pequeñas. Por este motivo, uno de los síntomas que pueden diferenciarla de la bronquitis es que se producen silbidos en el pecho, señal de que la respiración es costosa.

Tanto en el caso de la bronquiolitis como en la bronquitis, al tratarse de infecciones víricas, no se deben usar antibióticos, pues no tienen efecto contra los virus. Otro punto en común de ambas enfermedades es que una correcta higiene de manos, la hidratación y permanecer lejos del humo del tabaco ayudan a prevenirlas o sufrirlas con menor gravedad.

 

Sobre el autor:

Paula Buedo

… saber más sobre el autor