Diferentes estudios han tratado de determinar los beneficios o inconvenientes que pueden reportar las siestas. Las conclusiones generales que podemos sacar por el momento es que sus beneficios dependen de factores como el tiempo y la frecuencia. En este sentido, un nuevo estudio ha determinado que las personas que toman siestas habitualmente tienen más probabilidades de desarrollar hipertensión arterial y sufrir un accidente cerebrovascular.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores de este estudio, publicado en la revista de la Asociación Estadounidense del Corazón, Hypertension, observaron la asociación entre la frecuencia de las siestas durante el día y la incidencia de hipertensión o accidente cerebrovascular.
En la investigación participaron 358.451 personas que habían dado información sobre sus hábitos de siesta al Biobanco del Reino Unido. Los participantes no padecían hipertensión ni riesgos de accidente cerebrovascular y contribuyeron aportando información sobre la frecuencia de sus siestas.
Tras el análisis observacional, los resultados obtenidos demostraron que, en comparación con no dormir nunca la siesta, hacerlo de forma habitual durante el día estaba asociado con un mayor riesgo de hipertensión (12%) y accidente cerebrovascular (24%). "En nuestro análisis observacional prospectivo, los resultados indicaron que era probable que el aumento de la frecuencia de las siestas durante el día fuera un factor de riesgo causal potencial", señalan los investigadores.
Estos resultados se mantuvieron incluso después de que los investigadores excluyeran a las personas que presentaban un alto riesgo de padecer hipertensión, evidenciando aún más los resultados obtenidos.
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.