Sociedad
El último deseo de un joven surfista llega a Galicia dentro de una botella
El joven de 35 años perdió la vida en 2020 en un accidente de surf en Florida
Aunque el tema de la muerte sigue siendo aún un tabú para muchos, cada vez son más las personas que se animan a compartir con familiares y amigos lo que les gustaría que hicieran el día que ya no estén.
Esto es lo que hizo el surfista Paul Nichols, 11 veces campeón del mundo de surf, que perdió la vida a los 35 años en un accidente en 2020.
El joven fue incinerado, y su padre, no dudó en cumplir la voluntad de su hijo: repartir sus cenizas en botellas y tirarlas al mar, con un mensaje, que contenía el último deseo de Paul.
Una de las 44 botellas ha ido a parar a la costa de Oia, en la zona de A Centinela, en As Mariñas, Galicia, aseguran en Telemariñas.
La familia del surfista ha contestado
Secundino Vicente, un vecino de Mougás, fue el afortunado de toparse con este mensaje. Recubierta con espuma de poliuretano verde para poder sobrevivir a los golpes, la botella de whisky contenía un billete de dos dólares y unos papeles plastificados donde se podía leer 'ábreme'.
Vicente, cumpliendo con el imperativo, abrió la botella y en su interior pudo leer la historia del joven surfista. Dentro de la botella también había un tubo de 5 centímetros con las cenizas de Paul, que tal y como asegura el gallego de 59 años "ya descansan en la costa de Oia".
Los dos dólares también tenían una misión: "Para que quien encuentre el mensaje se tome una cerveza a mi salud en un bar de playa".
La emotiva historia no acaba aquí, y Paul dejó escrito el correo de su hermana, para que todo aquel que encontrara una botella, se pusiera en contacto con ella, para poder contarle a su hija Zoe, "que sigo surfeando por el mundo".
El periódico gallego, que ha publicado la noticia, fue el encargado de mandar el mensaje, y la respuesta de su hermana: "Estuvimos llorando todo el día al enterarnos. Sentimos que este es un mensaje de arriba. Mi hermano era buena persona y traía la alegría a la familia".
De momento, ya han aparecido cinco botellas en las costas de Florida, Luisiana, Bahamas y Texas.
