Con el paso del tiempo, el asfalto de las calles suele estropearse, sobre todo el de las ciudades más antiguas con mucho tránsito. Se acaban formando grietas de un color apagado que estropean el paisaje, una realidad que el artista callejero conocido como Ememem se ha dispuesto a cambiar.
Se mueve por la noche para mantener el anonimato y nunca se sabe dónde podrá encontrarse su siguiente obra en forma de mosaico de colores que coloca en las grietas del pavimento.
Sus obras contribuyen a dar vida a las calles de las ciudades y lo hace a través de la técnica del Flacking, que en francés significa "charco", según informa La Vanguardia. Esta técnica consiste en reparar las grietas y fracturas del asfalto, aceras e incluso muros, rellenando los agujeros con mosaicos de colores.
“Mi obra es la historia de la ciudad, donde los adoquines han sido desplazados; un camión del mercado de verduras arrancó un trozo de asfalto. Cada uno se convierte en un flack“, explica.
Mosaicos de colores en Madrid y Barcelona
Aunque el artista callejero Ememem procede de Lyon (Francia), su ciudad natal, sus obras pueden verse en las calles de muchas otras ciudades francesas, incluso en Madrid y Barcelona.
Con solo cerámica, madera y bitumen consigue rellenar estos espacios deteriorados, atrayendo la atención de los más avispados. Su éxitoso trabajo le ha llevado a su último encargo: decorar el lugar donde se construye una parada del nuevo metro de Grand Paris Express. Por otra parte, tiene nueve exposiciones entre manos y muchas más grietas donde dejar su huella.