“Como seres humanos creo que tenemos una necesidad inconsciente de comunicarnos. Lo importante es que el lenguaje fluya por manifestar verdades, crear un diálogo de opiniones que estás dispuesto a reformar”, explica Emilio Lledó (Sevilla, 1927) en la entrevista concedida a 65ymas. Con una amplia trayectoria, el filósofo humanista español formado en Alemania, conocido como "el sabio de las palabras", es además miembro de la Real Academia de la Lengua y premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades.
Esto es así desde el inicio de la sociedad democrática, porque el primer bloque genial filosófico, de eso que se llama cultura, son los diálogos de Platón, que surgen como forma de comunicación a través de más de 100 personajes y sus diferentes puntos de vista”, aclara Lledó.
Nuevo diccionario filosófico
Es precisamente del diálogo con el otro, de la conversación y la escucha a los demás de donde surge todo el pensamiento filosófico y, al mismo tiempo, el germen del nuevo libro “Palabras en el tiempo. Abecedario filosófico de Emilio Lledó” (Fundación José Manuel Lara, 2019) que se acaba de presentar en Madrid.
Una selección de textos en torno a las palabras, autores y conceptos clave de la obra de este pensador contemporáneo que defiende la educación como engendradora de libertad. El libro ha sido elaborado por uno de sus discípulos, el filósofo Cipriano Játiva (Albacete, 1959), que conoció al profesor Lledó cuando era un jóven estudiante de Filosofía.
“El valor del pensamiento de Lledó está en el lenguaje escrito y hablado. Es un maestro de la palabra. El amor por el lenguaje es el mensaje más importante sobre su pensamiento, gracias a él y a su amistad, comprendí la importancia crucial de las palabras, de la filología, de la reflexión filosófica”, ha declarado Játiva en la presentación del libro.
Es más, el diálogo que han establecido ambos durante años y la amistad forjada es el hilo conductor de este libro, según reconocen. “Yo he sentido a estas alturas de la película, el lema de Aristóteles de que “la amistad es una parte necesaria y urgente de la vida”, opina Lledó dando muestra de su complicidad.
“Con el libro de Cipriano he tenido sensaciones originales en el sentido etimológico de la palabra. Y eso a mi edad, es una novedad”, afirma el maestro. “Veía latir el lenguaje tejido en su recopilatorio y en su prólogo de 80 páginas. El latir del logos o conocimiento, cuando lees el texto de un autor, sea quien sea”, añade Lledó.
El valor de la decencia en la España de ayer y hoy
Lledó sostiene que “la educación actual no debe ser rajada en distintos intereses en los que media el dinero. El fin de la polis debe ser la educación, no un Estado que imponga”, opina. “Ahora se habla mucho de la libertad de expresión, pero ésta no tiene la menor importancia si no hay libertad de pensamiento. La libertad de una mente que fluye”, sostiene.
Respecto a la situación política actual de España y Cataluña defiende que no entiende las separaciones. “Yo he vivido en muchas ciudades, visto caer el muro de Berlín. Y he sido feliz en todas ellas”, aclara Lledó. “En cuanto a la situación política quiero ser optimista, y como decía Aristóteles, “la melancolía es el gesto supremo de la esperanza”, añade.
Pero sobre todo considera que “un político tiene que ser decente. Y si no es decente acabará destrozado por sí mismo, ya que la mente se corroe a base de mentiras”, afirma Lledó. “A mi al menos, lo que me da fuerza para seguir creando es vivir con decencia, con esa coherencia que siento conmigo mismo. Me siento el mismo que hace casi 80 años emigró a Alemania para estudiar en la escuela de Filosofía, que daba clases de alemán a los obreros emigrados en el país”, explica.
"Me siento incluso el mismo niño de 10 años que tuvo su primer acercamiento hacia la creación de la libertad, gracias al Francisco, maestro republicano en Vicálvaro que invitaba a sus alumnos a leer a los clásicos, al Quijote, y crear sugerencias de lectura”, sostiene.
Etapa vital
Como reflexión general sostiene que “si no tuviera curiosidad estaría fuera de la vida. A mis 91 años mis planes siguen siendo seguir creando, dialogar con mis clásicos, releer a Kant, Platón, el Quijote….”, asegura. Asume esta etapa vital para el disfrute y también para la creación. “Espero que aún queden muchos años y que algunas de las palabras y conceptos reflejados en este Abecedario elaborado por Cipriano, pervivan”.
Conceptos como la verdad, que según recoge el libro se refiere a “al fundamento de las relaciones humanas. Una larga lucha ante la oscuridad de un lenguaje apoyado en distintas formas de poder, fue de esas palabras que inventaron, en la verdad como prueba y diálogo de racionalidad, uno de los motores de progreso de la Inteligencia”.
Por último, lanza un mensaje a los más jóvenes, para los que este libro puede ser un acercamiento digerible a la filosofía a través de ideas concisas sobre la obra del pensador. “Les invito a que en plena era digital, no olviden los libros. Vivimos en la era de internet. Yo tengo móvil, uso el ordenador pero solo para lo que me interesa. No vivo proyectado en lo que emite una pequeña pantalla. Vivo en los libros, en la mirada del mundo, en las personas, en la amistad…”, puntualiza.