La Fundación Fernando Pombo (@FundacionFPombo), la Fundación Grandes Amigos (@GrandesAmigos__) y la Clínica Legal de la Universidad de Alcalá (@ClinicaLegalUAH) han presentado el proyecto Envejecer con derechos; que la edad no sea un límite, conformado por una serie de folletos divulgativos y audioguías, dirigidos a las personas mayores y a su entorno (familiares, profesionales, voluntarios, etc.), que tiene como objetivo facilitar el conocimiento de conceptos jurídicos clave y el ejercicio de estos derechos fundamentales, con todas las garantías y en condiciones de seguridad, libertad e igualdad.
En el acto, que ha tenido lugar este martes en el auditorio de Gómez-Acebo & Pombo, han participado Javier Gomá Lanzón, letrado del Consejo de Estado, filósofo, escritor, ensayista y director de la Fundación Juan March; Manuel Martín Martín, senior partner de Gómez-Acebo & Pombo; así como los impulsores del proyecto, expertos del ámbito jurídico y social y de los derechos de las personas mayores: Ana Higuera Garrido, directora de la Fundación Fernando Pombo; José Ángel Palacios Merino, coordinador de comunicación de la Fundación Grandes Amigos; Miguel Ángel Ramiro Avilés, director de la clínica legal de la UAH; Antonio Martínez Maroto, patrono de la Fundación Grandes Amigos; y Patricia Fita Rios, responsable de proyectos de la Fundación Fernando Pombo.
Todos ellos han puesto especial énfasis en cuestiones que afectan a personas de cualquier edad, pero especialmente a las personas mayores, como son: las diferencias que hay entre dependencia y discapacidad, igualdad y no discriminación, el derecho y la integridad física, hasta dónde llega el derecho a la alfabetización digital, para qué sirve el documento de instrucciones previas o qué supone el derecho a la tutela judicial efectiva.
Trece folletos para trabajar por los derechos de las personas mayores
Una de las conclusiones a las que se ha llegado tras el trabajo de análisis e investigación previo es que las personas mayores no siempre conocen y ejercen sus derechos con garantías, algo en lo que influye la falta de información, formación e incluso accesibilidad. Esta es la razón de la colaboración de estas tres entidades de diferentes ámbitos (jurídico, universitario y social), aspirar a aunar el apoyo y la participación de nuevas instituciones públicas y privadas que se comprometan a difundir y trabajar por los derechos de las personas mayores que incumben a toda la ciudadanía.
En concreto, se han elaborado un total de 13 folletos que tienen como objetivo, por un lado, la alfabetización jurídica y el empoderamiento de las personas mayores; y por otro, convertirse en una herramienta de utilidad para las personas mayores y su entorno, ya sean familiares, profesionales del sector sociosanitario, voluntarios/as de entidades sociales que los acompañan u otras personas cercanas.
Cada uno aborda diferentes temas: igualdad y no discriminación; dependencia y discapacidad, vida independiente e integridad física; alfabetización digital; segunda opinión médica; consentimiento informado; acceso a las prestaciones sanitarias; documento de instrucciones previas; libertad de movimiento y residencia; desplazamiento a otra comunidad autónoma; principio de radicación; acceso a la justicia; y asistencia jurídica gratuita y turno de oficio. Están disponibles en la página web, donde se pueden leer y escuchar de forma gratuita.
"Lo mejor que puede pasar con la vejez es que exista"
Javier Gomá Lanzón ha inaugurado la presentación del proyecto, y lo ha hecho reflexionando sobre la dignidad y el envejecimiento. "La dignidad es algo que está en boca de todos, pero nadie la define. Hoy en día, se considera que es de cada persona. Para mí, entre otras características, la dignidad es una cualidad del individuo que lo hace resistente a todo". Y respecto al proyecto, señalaba que estos folletos son "una forma de divulgar la dignidad de estas personas, hacerlas conscientes de sus derechos para que puedan ejercerlos. Es un trabajo de dignidad", añadía, resumiendo su intervención en una palabra: "respeto".
En la mesa redonda que le ha seguido, en la que se han presentado los primeros resultado de este proyecto, Manuel Martín ha destacado que "vivimos en una sociedad cada vez más longeva y envejecida, es un hecho. Pero tengo la impresión de que ni las estructuras sociales ni económicas, ni nuestra manera de pensar, reflejan todavía ese profundo cambio social y demográfico".
Por su parte, Ana Higuera, explicaba cómo se ha desarrollado este proyecto y la investigación previa realizada: "Decidimos comenzar por elaborar estos folletos informativos y las audioguías que hoy presentamos, con un enfoque práctico y a la vez riguroso, para acercar a las personas mayores los derechos que pueden ejercer en situaciones frecuentes". "Este es el primer paso", añadía, "nuestro objetivo es dar a conocer este trabajo y que sea útil. Ya hemos descubierto en nuestras reuniones muchos otros temas que nos quedan pendientes por investigar y trabajar, por lo cual, esto es solo un principio".
José Ángel Palacios señalaba que este proyecto es "para beneficio de toda la población", ya que "todos vamos a envejecer". La Fundación Grandes Amigos es una ONG de voluntariado que acompaña a las personas mayores en riesgo o situación de soledad y lucha por sus derechos. Como tal, Palacios daba algunos ejemplos de problemas a los que se han enfrentado las personas mayores a las que acompañan en los últimos años: "Cada vez nos encontramos con más situaciones difíciles para las personas mayores, que no están ejerciendo sus derechos. Muchas veces por cuestión de desconocimiento o mala interpretación. Por eso decidimos unirnos a este proyecto. Porque alzar la voz es necesario, pero construir soluciones es lo más importante", explicaba.
Como ejemplo recordaba lo sucedido durante la pandemia, cuando las restricciones a la movilidad y a la socialización se iban retirando para todo el mundo, pero en menor medida para las residencias de mayores, donde se permitían solo las visitas a los familiares de los usuarios. "La realidad que nos encontrábamos es que mucha de esa gente mayor no tiene familia o, si la tiene, a lo mejor vive lejos o incluso en otra residencia".
La colaboración entre entidades, que seguramente no tienen nada que ver, pero si comparten un enfoque en común que puede dar buenos resultados, es el espíritu con el que se inició este proyecto, que busca "más información, formación, accesibilidad y colaboración", señalaba Palacios. "A veces se nos olvida que mayores vamos a ser todos, por eso me gusta la transversalidad que tiene el proyecto".
Miguel Ángel Ramiro contaba a su vez su experiencia en su trabajo de alfabetización legal en relación con el VIH, que les ha conducido a participar en este proyecto para promover la alfabetización legal también en las personas mayores, "porque si no sabemos cuáles son nuestros derechos, no podemos reivindicarlos". "El principal problema que se puede apreciar en la situación legal de las personas mayores se traduce en la discriminación por edad. Un tipo de discriminación interseccional que podemos llegar a sufrir todos. Este es el inicio de una pequeña revolución en la reivindicación de derechos", añadía.
En este sentido, Antonio M. Maroto, comentaba que "lo primero es dar información y formación, no solo a las personas mayores, sino también a los profesionales de la gerontología y demás instituciones que les atienden y acompañan". Del mismo modo, Patricia Fita señalaba que "el conocimiento es poder. Por ejemplo, todo el mundo tiene derecho a una vida independiente. Pero ¿en qué se traduce este derecho? En que respeten nuestro núcleo familiar, nuestras relaciones... independientemente de dónde vivamos. Y esto, en muchas ocasiones, no se cumple". Y así, "los folletos pueden ayudar a las personas mayores a despertar y no resignarse".
Por último, la presidenta de la Fundación Grandes Amigos agradecía a la Fundación Fernando Pombo y a la Clínica Legal de la Universidad de Alcalá su "buen trabajo". También ha querido hacer una sugerencia por si el trabajo continua: "propongo que también se estudie sobre la pluralidad y la heterogeneidad de las personas mayores". Una forma de "cambiar el valor social de las personas mayores en esta sociedad" será "no perdiendo de vista el hecho de que las personas mayores no vivimos en otro mundo, estamos aquí donde estamos todos, y somos ciudadanos y ciudadanas, es decir, sujetos de derechos y de deberes". Para ello, "tenemos que conseguir que la edad no sea un límite", concluía.
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.