Estafa más de 41.000 euros a dos hombres mayores a la vez simulando ser su novia

En la era digital, las relaciones y las conexiones humanas han adoptado nuevas formas, facilitadas por las redes sociales y las aplicaciones de citas. Sin embargo, esta evolución también ha traído consigo una serie de riesgos, especialmente para las personas mayores. Las estafas amorosas online son cada vez más comunes y siempre debemos estar atentos.

En la vida real, lejos del mundo virtual, las personas mayores también se enfrentan a este tipo de engaños. Estas manipulaciones explotan la vulnerabilidad emocional y la soledad de los mayores. Los estafadores, que pueden ser personas conocidas o extraños que logran ganarse la confianza de sus víctimas, utilizan tácticas de persuasión y seducción para crear la ilusión de una relación genuina. Con promesas de amor, matrimonio y compañía, manipulan a sus víctimas para obtener beneficios económicos, ya sea mediante transferencias de dinero, la cesión de propiedades o la inclusión en testamentos y herencias.

El caso de Isidoro

Una víctima de esta estafa es Isidoro.Tiene 92 años y vive en Badajoz. Después de quedar viudo hace unos años, creyó haberse vuelto a enamorar. Concretamente, de Laura, una joven de 23 años con dos hijos y de nacionalidad rumana. 

Como comenta Isidoro en una entrevista que ha concedido a Y ahora Sonsoles (Antena 3), tenían una relación, a su parecer, de pareja, en la que Laura le visitaba y estaba en su casa "como si fuera su mujer". Hacía las cosas de la casa y "no le pedía nada". Podría parecer que era una relación sincera y de amor por parte de los dos. Pero Laura también tenía las claves bancarias de Isidoro e incluso había sido nombrada heredera de todo su patrimonio. 

Isidoro explica que empezó a notar "cosas" que le hicieron perder el atractivo por ella, como que tenía un supuesto hermanastro al que veía mucho, pero todo esto fue después de haberle comprado 6 teléfonos móviles a la joven y varias joyas.

El "hermanastro" que destapó la estafa

Todo habría seguido así y la historia de Laura e Isidoro habría continuado de no ser porque el supuesto "hermanastro" era en realidad la otra pareja de Laura. También de avanzada edad, Laura tenía otro novio, que ante la sospecha sobre sus intenciones con él, se mantuvo alerta, hasta que un día descubrió que la joven se había llevado su cartilla. 

Aprovechó entonces para acudir a la Policía y explicar la situación, que contrastó datos y confirmó la estafa. Emitieron una orden de búsqueda y detención y la joven finalmente fue arrestada por los Mossos d'Esquadra el pasado 23 de mayo en Gerona. Avisaron entonces a Isidoro, que a día de hoy dice no sentirse estafado, y le mantiene como heredera de toda su herencia. "Me abrazaba y me daba más cariño que incluso yo a ella", afirma a Y ahora Sonsoles. Son algunas de las actitudes sobre su supuesta historia de amor a la que Isidoro sigue aferrándose.

Quedó así al descubierto el modus operandi de Laura: hacer creer que eran sus parejas para sacarles beneficios económicos, para robarles, en definitiva. Los datos de la estafa a ambas víctimas son los siguientes: más de 50 extracciones bancarias, compras en joyas (que después revendía por dinero al igual que los teléfonos móviles) y más de 41.000 euros.