La Dirección General de Tráfico (@DGTes) ha recordado la importancia de revisar el vehículo antes de realizar un trayecto de largo recorrido, ya que en caso de no hacerlo, las posibilidades de que el coche le 'deje tirado' aumentan.
La batería, los neumáticos, el motor y el alternador son los elementos que más averias causan, y que requieren una asistencia inmediata en carretera.
Lo que debe revisar
La DGT publicó en su revista digital las partes del vehículo que deben revisarse antes de emprender un viaje:
- Dirección. Si nota holguras, ruidos, vibraciones, dureza anormal al girar o desgaste irregular en los neumáticos.
- Frenos. Las pastillas, los discos y el nivel del líquido de frenos deben revisarse.
- Suspensión. El deterioro es casi imperceptible, pero de ella dependen la estabildiad y capacidad de frenado.
- Neumáticos. Debe comprobarse la profundidad del dibujo (1,6 milímetros), si hay deformaciones, desgaste irregular, y la presión (en frío).
- Luces. Intermitentes y alumbrado deben estar en perfecto estado y bien regulados.
- Batería. Si hay problemas al arrancar, debe revisarla también.
- Niveles y filtros. Atento al líquido de frenos, limpiaparabrisas, aceite, así como a la tensión de las correas y el estado de los filtros de aceite, aire y polen.
- Aire acondicionado. Si enfría poco o se oyen ruidos debe revisarlo.
- Lunas y limpiaprabrisas. Comprobar el estado de las lunas y las escobillas del limpiaparabrisas.
- Inyección. Ante aumentos del consumo, tirones al arrancar o en marcha, debe revisar el sistema de inyección.
