Una experta en longevidad da las claves para ralentizar el envejecimiento

Según un reciente estudio de la Fundación Mutua Madrileña y la Confederación de Salud Mental, casi la mitad, 4 de cada 10 españoles valoran negativamente el estado de su salud mental. Las personas que peor la valoran son las mujeres y los jóvenes; y las tres razones más señaladas son dificultades económicas (91,4%), incertidumbre ante el futuro (89%) y presión, exigencias y estrés del día a día (88,8%). 

El estrés a corto plazo no siempre es malo

La doctora Elissa Epel, catedrática del Departamento de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento de la Universidad de California y experta internacional en estrés, bienestar y envejecimiento óptimo, ha asegurado que el estrés a corto plazo "no siempre es malo". Dice que "prepara la mente y el cuerpo para lo que hay que hacer en cada momento", aunque es "más extremo y constante y tiene efectos tóxicos en el organismo". 

La investigadora afirma que ha visto "cómo el estrés puede desgastar nuestras células prematuramente y aumentar el riesgo de obesidad, enfermedades cardiacas, demencia y depresión". Las dos claves que ofrece para evitar envejecer aceleradamente y vivir mejor las engloba en lo que denomina "stress fitness". 

Esta técnica es una manera de "ejercitar el cuerpo con breves ráfagas de estrés". Epel recuerda que "los estudios demuestran que puede mejorar la salud y la vida útil regenerativa de las células, en lugar de desgastarlas lentamente". La experta habla de tener "períodos cortos e intensos" de estrés para entrenar al cuerpo y hacerlo "más resistente" al estrés futuro. 

'Stress Fitness'

La doctora recomienda una "ronda de entrenamiento a intervalos de alta intensidad" de unos 7 minutos. La clave es ir subiendo de intensidad desde ejercicios sencillos hasta llegar a planchas, flexiones, zancadas o burpees. Aconseja realizar el ejercicio durante 30 segundos y descansar 10 hasta alcanzar los 7 minutos.

Con este método se puede descubrir nuestro nivel de dificultad, hasta dónde nos sentimos cómodos y cuándo queremos abandonar. "No luches contra ello", advierte. Al finalizar, lo mejor es ducharse con agua fría: "Los estudios demuestran que darse una ducha rápida y fría puede reducir la inflamación, aumentar la longevidad y mejorar el metabolismo". 

Su consejo es cambiar el agua de caliente a fría en el último momento de la ducha: "¿Puedes permanecer bajo el chorro entre 15 y 30 segundos? ¿Un minuto? Esfuérzate al máximo de la misma manera que lo harías con el ejercicio, y luego relájate. Esta es la clave".