Cuando llega la noche y estamos a punto de dormir, siempre tratamos de sentirnos seguros realizando diferentes acciones dentro de nuestro hogar. Adoptamos diversas rutinas entre las que pueden incluir una revisión de la casa, revisar que las puertas y ventanas estén bien cerradas, activar alguna alarma, entre otras.
Una práctica muy común en los hogares españoles es cerrar la puerta y dejar la llave por dentro, creyendo que de esta manera le podrán poner más trabas para que los ladrones puedan acceder a la vivienda.
Sin embargo, esto no es así. Samuel Prieto, del Instituto Superior de Seguridad Pública (Netpol), advierte sobre los peligros de esta práctica. Indica que, las cerraduras de embrague simple, que permiten dejar la llave puesta por dentro, brindan una falsa sensación de seguridad y que están prohibidas en muchos países por los altos riesgos que tiene.
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Prieto cuenta en una entrevista con ‘El Panda Inversor’ que dejar la llave puesta por dentro de casa antes de dormir “no aporta más seguridad. De hecho, puede ser contraproducente”.
El experto en seguridad explica que los bombines de embrague simple no están permitidos en muchos países porque impiden abrir la puerta desde el otro lado si la llave está puesta por dentro. Esto puede llegar a ser contraproducente en una emergencia médica, ya que los servicios de emergencia que cuentan con llaves de acceso, no podrán acceder a la vivienda.
“Si alguien está durmiendo y tiene un problema médico, los servicios de teleasistencia, que suelen tener un juego de llaves, podrán encontrarse con la imposibilidad de acceder al domicilio porque la llave está puesta por dentro”, menciona Prieto.
Sobre el autor:
Stefano Traverso
Stefano Traverso es licenciado en Ciencias de la Comunicación en la USMP de Perú; con un máster en Marketing Digital & E-commerce en EAE Business School de Barcelona. Ha trabajado en diferentes medios de comunicación en Perú, especializándose en deporte, cultura y turismo.