Concienciar a los profesionales que trabajan con personas mayores, pero también a la sociedad en general sobre cómo prevenir el edadismo o discriminación por edad es el objetivo de la nueva Guía para la Promoción del Buen Trato y la Prevención del Edadismo en Personas Mayores, elaborada por las Asociaciones de Universidades Populares (@up_aupex) y el Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (@JuntaEx_Sanidad), que se acaba de presentar en Mérida.
Según define la Organización Mundial de la Salud (OMS), el edadismo surge cuando "la edad se utiliza para categorizar y dividir a las personas por atributos que ocasionan daño, desventaja o injusticia y menoscaban la solidaridad intergeneracional". Este edadismo se puede producir en diferentes ámbitos, como el sociosanitario, cultural, el de participación comunitaria, empleo y economía, educativo, las tecnologías de la información y la comunicación, los medios de comunicación o en las relaciones sociales.
Objetivo: evitar que se infantilice a las personas mayores
Algunos ejemplos de edadismo que ha expuesto el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles (@jvergelesb), en la rueda de prensa de presentación, han sido no dar toda la información a una persona mayor sobre su estado de salud por intentar protegerla, fruto de un "modelo paternalista" que aún se produce en la relación con los mayores, o "tomar la iniciativa de que estas personas no están capacitadas para opinar sobre su futuro".
Otro ejemplo sería pensar que a todas las personas mayores les gusta lo mismo, por ejemplo, en el ámbito de la cultura, o no diseñar actividades para el aprendizaje a lo largo de toda la vida. Para evitar este tipo de situaciones, Vergeles anima a "pensar que la edad no es un motivo para encasillar a todo un grupo de personas dentro de un mismo cliché", así como ha rechazado que se llegue a "infantilizar" a las personas de edad, porque "no hay nada que lo justifique".
Prevenir que se ejerza desde las instituciones
Vergeles ha explicado que el edadismo es un concepto, que se configura alrededor de una serie de estereotipos y prejucios que se asignan a personas de edad, que llevan a una discriminación, y por tanto se considera "a todas las personas por razón de edad como iguales, personas frágiles y que su capacidad para decidir está mermada".
Una discriminación que no solo puede ser ejercida por personas de forma individual, sino que puede ser "más grave" aún cuando se ejerce por parte de organizaciones o por instituciones, e incluso por las propias personas mayores hacía sí mismas. Esta guía pretende en primer lugar dar a conocer el edadismo, para poder identificar y, por tanto, para poder combatirlo. Está dirigida a personal técnico y representes de las organizaciones, a quienes proporciona conocimientos y habilidades para luchar y prevenir el edadismo.
Las universidades populares, espacios de referencia para combatirlo
Por su parte, la directora de Aupex, Josefa Moreno, ha subrayado que las universidades populares son "espacios de referencia para trabajar en la salud e igualdad de las personas", y también para el diseño de programas relacionados con su salud.
Así, se ha referido al desarrollo del programa "99 razones para ser Sepadactivos', en el que se trabaja el envejecimiento activo, el reto demográfico o la propia lucha contra el edadismo, en los 37 centros de mayores que gestiona el SEPAD en la región y en las 213 universidades populares que se despliegan en todo el territorio extremeño.
Así, Moreno ha subrayado que la guía es "solo el comienzo", porque se continuará trabajando el programa 99 Razones en todos estos espacios, en los que se pone en marcha "una reflexión continua para seguir solucionando las necesidades que sigue surgiendo de atender la igualdad y la no discriminación por razón de edad".