Hilda Siverio, la influencer de Tenerife que muestra su lucha contra el cáncer de mama base de sonrisas, se encuentra "en una situación muy crítica" en el hospital, según contaba su hija Valeria en las redes sociales recientemente, pidiendo a su vez respeto para la familia en estos momentos tan duros. "Me parece muy triste que en una situación así me vea obligada a grabar este vídeo por la falta de respeto que estamos recibiendo", comentaba en su propia cuenta de TikTok.
Su madre, Hilda, fue diagnosticada con cáncer de mama en 2014, con 43 años, cuando estaba embarazada de cinco meses de su tercer hijo, según explicaba en su momento al Diario de Avisos. En este tiempo, Hilda se ha sometido a nueve operaciones, hasta que en 2021 hizo público que sufría metástasis ganglionar y ósea, dejándole un pronóstico muy poco favorable, comenzando así su tratamiento paliativo.
"Como siempre, que mi mejor arma es vivir cada día como si fuera el último, con alegría y sin dramas", decidió tras conocer la noticia, adoptando el lema "sácale una sonrisa al cáncer", con el que ha conseguido el apoyo de millones de personas y su aplauso por su forma de sobrellevar algo tan duro desde el humor y sin ocultar los efectos que la enfermedad tenía en ella.
Sin embargo, su estado empeoró a partir de Año Nuevo, tal y como notaron muchos seguidores ante la ausencia de nuevo contenido en sus perfiles. Ha sido su hija Valeria quien ha explicado el verdadero estado en el que se encuentra su madre, pidiendo respeto para su familia debido al acoso que ha llegado a recibir en este tiempo de personas que querían saber cómo se encontraba Hilda.
"Es tanta la falta de respeto que está habiendo que una persona ajena a mi familia y a mis padres se le ocurrió la brillante idea de venir al hospital, no solo alterando a mi madre, sino sacándole una foto en el estado en el que está", contaba. "Mi madre se encuentra en una situación muy crítica, son sus últimos días de vida y nos estamos intentando despedir de ella".
"No sabemos cuánto durará esta situación, solo sé que los labios rojos y la sonrisa no se le va. Espero que comprendan que ahora mismo los familiares y amigos estamos en una situación difícil y que ante todo queremos que nos dejen tiempo para poder disfrutar de ella. Sobre todo pido respeto", finalizaba, agradeciendo por su parte a todas las personas que "nos apoyan de verdad".
"Con una fuerza increíble, sigo aquí, gracias por el amor, porque cada día es este regalo que me da la vida", escribía Hilda en sus redes en su última publicación este fin de semana, en la que aparece en el hospital junto a su hija.