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La farmacia rural es clave para fijar población en los territorios, en especial femenina y en edad de trabajar, y favorece el empleo. Estas son algunas de las consecuencias del informe Aportación de valor del modelo de Farmacia a la cohesión social y el reto demográfico, elaborado por Analistas Financieros Internacionales (AFI).
Los datos del documento, presentado este martes en la jornada Farmacia: Cohesión Social y Salud Pública, celebrada en el Senado por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF), reflejan que las farmacias rurales producen un impacto económico de 1.600 millones de euros anuales, con un efecto multiplicador superior al de otros sectores productivos.
Además, concluye que estas farmacias aportan 23.600 empleos a jornada completa y, por cada euro que generan, el conjunto de la economía española se beneficia en 4,30 euros, mientras que por cada empleo se favorece la creación de otros 3,26 puestos de trabajo a jornada completa.
Según el informe, en España hay más de 4.400 farmacias ubicadas en municipios rurales de pequeño tamaño (menos de 5.000 habitantes) que atienden a unos 5,6 millones de personas, lo que supone casi el 10 por ciento del total de la población.
De hecho, el 20 por ciento del total de farmacias españolas se localizan en municipios rurales de pequeño tamaño, lo que equivale a 4.422 farmacias, mientras que el 8,4 por ciento se ubican en micromunicipios rurales, unas 1.864, atendiendo a 1,14 millones de personas.
Por comunidades autónomas, Extremadura (53,6%), Castilla y León (52,5%), Castilla-La Mancha (46,4%) y La Rioja (44,2%) son las que concentran un mayor porcentaje de farmacias en municipios rurales de pequeño tamaño.
El informe apunta que nueve de cada diez residentes en municipios rurales pequeños cuenta con una farmacia en su municipio. Así, se indica que este tipo de farmacias son responsables de al menos 11.851 empleos. El 65,6 por ciento de los titulares de farmacia en municipios rurales de pequeño tamaño son mujeres, y hasta el 68,8 por ciento en micromunicipios.
De acuerdo con los resultados del estudio, en los municipios de menos de 2.000 habitantes que cuentan con una farmacia la población ha decrecido menos entre 2008 y 2021 que en aquellos sin farmacia (-0,4% frente a -0,6%). Además, el ritmo de despoblación fue más lento: -1,1 puntos porcentuales.
Además, la población femenina cayó un 13,2 por ciento en municipios pequeños que contaban con farmacia, frente al 17,1 en las localidades sin farmacia. El ritmo de pérdida de población femenina fue 2,3 puntos porcentuales más lento.
La pérdida de puestos de trabajo fue 3,7 puntos porcentuales menor en municipios rurales de menos de 2.000 habitantes con farmacia. En la misma línea, la tasa de paro en aquellos con farmacia aumentó un 1 punto porcentual, pasando del 17,5 al 18,5 por ciento. Sin embargo, en aquellos sin farmacia, creció en 5,3 puntos porcentuales, desde el 15 al 20,3 por ciento.
El informe alerta de que, pese al buen impacto que tienen en el territorio, una de cada tres farmacias ubicadas en micromunicipios rurales se encuentra en situación de viabilidad económica comprometida, por lo que su futuro está en riesgo.
"Ejemplo de cohesión, igualdad y equidad"
El encargado de presentar el estudio ha sido el socio director de AFI, Diego Vizcaíno, quien ha destacado que "los datos reflejan que estas farmacias potencian la cohesión social al ofrecer los mismos servicios asistenciales que en las ciudades, pero sin embargo se enfrentan a situaciones adversas en el desarrollo de su actividad, relacionadas con problemáticas sociodemográficas, económicas y de infraestructuras que han situado a muchas al limite de la viabilidad económica".
Por todo ello, Vizcaíno ha reclamado que "la farmacia ha de tenerse en consideración como interlocutor y herramienta útil en el desarrollo de las políticas que tienen como objetivo lograr la cohesión social y territorial en España".
Pero el socio director de AFI ha puntualizado que para que puedan ofrecer todo su potencial es necesario dotarlas de estabilidad mediante "el diseño de nuevas fórmulas de concertación y remuneración de servicios sanitarios y sociosanitarios, así como el estudio de incentivos fiscales".
En la inauguración, la vicepresidenta primera del Senado, Cristina Narbona, y el presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Jesús Aguilar, han reivindicado la importancia de las oficinas de farmacia y de los farmacéuticos para el Sistema Nacional de Salud (SNS).
Al hilo del informe, Aguilar ha argumentado que las farmacias son "una solución para el reto demográfico". "Contamos con un sistema farmacéutico que no solamente es un activo sanitario y social de máxima importancia, sino también un motor de empleo y generación económica en el conjunto del Estado. En el ámbito rural, las farmacias cohesionan el territorio, son un vector de arraigo y fomentan el desarrollo económico y a frenar la pérdida de población", ha asegurado.
Narbona ha destacado que la labor de las farmacias "ha sido imprescindible para mitigar el dolor que ha sido para tantas familias y profesionales la pandemia de COVID-19". "Es evidente el papel que juegan las farmacias en temas de cohesión territorial y de apoyo al sistema de Salud Pública, sino también desde el punto de vista de crecimiento económico y de creación de empleo", ha añadido.
Por su parte, Aguilar ha defendido que el modelo de farmacia español es "un ejemplo de cohesión, igualdad y equidad porque es una conquista social de todos los ciudadanos". "Cualquier persona de cualquier lugar de nuestro país siempre tiene una farmacia o un farmacéutico muy cerca", ha recordado.
El papel de la farmacia en la salud pública
El presidente de los farmacéuticos ha instado a llegar a un "consenso" como "motor para que las administraciones pasen de las palabras a los hechos" y se avance hacia "una atención sanitaria integral con mayor colaboración interprofesional".
Aguilar considera que "ha llegado el momento de aprovechar el conocimiento de las farmacias, su profesionalidad y capacitación para poner en marcha las reformas necesarias hacia una atención integral desde la farmacia, en especial en las zonas más despobladas".
Por ello, ha pedido a Narbona que cuenten con los farmacéuticos y les tengan "muy presentes" en dos de las leyes que se tendrán que debatir y aprobar en el Senado, la ley de creación de la Agencia Estatal de Salud Pública y la reforma de la Ley de Garantías del Medicamentos. "A través de ambas tenéis la oportunidad de mejorar la salud y el bienestar de todos los ciudadanos, con independencia de lugar de residencia", ha remachado.
Por último, el presidente de los farmacéuticos españoles ha insistido en la gran aceptación que tienen por parte de los ciudadanos. "Así lo vemos en los datos de las encuestas realizadas, la última con la empresa demoscópica GAD3 el pasado octubre, en la que el 88 por ciento de los encuestados valoran positivamente la colaboración de la farmacia durante la pandemia de la COVID-19. Además, el 80 por ciento de los españoles cree que las farmacias pueden prestar más servicios y 9 de cada 10 reclama una mayor integración en Atención Primaria", ha concluido.