Las mejores fotos de abuelos de Steve McCurry

Steve McCurry es uno de los mejores y más apreciados fotógrafos de la historia. Su trabajo ha dado la vuelta al mundo y ha mostrado la realidad, en ocasiones cruda, de una forma directa. Pero en otras ocasiones, íntima y tierna. A través de su cuenta en Instagram, (stevemccurryofficial), el fotógrafo lleva tiempo mostrando tiernas instantáneas de nietos junto a sus abuelos. En el texto de todas ellas, McCurry cita una frase del escritor Alex Haley: "Nadie puede hacer por los niños pequeños lo que hacen los abuelos. Los abuelos esparcen polvo de estrellas sobre la vida de los niños pequeños".

Desde las vastas estepas de Mongolia, hasta Alemania, pasando por el Tibet, Japón, Honduras, India, Sri Lanka,  Croacia o afganistán, Steve McCurry ha retratado a multitud de nietos con sus abuelos. Fotografías que demuestran que la especial relación que une a los nietos con sus abuelos, es universal.

A lo largo de su carrera, Steve McCurry ha fotografiado muchos conflictos internacionales y ha captado el dolor, el horror de la guerra y sus secuelas. Pero también ha hecho fotografías llenas de alegría y optimismo, llenas de color, esperanza y ternura. Así son la mayor parte de las fotos de nietos y abuelos alrededor del mundo.

Las fotografías de Steve McCurry son historia viva de la fotografía, como el retrato de la niña afgana que el fotógrafo hizo en junio de 1984 en el campamento de refugiados Nasir Bagh de Pakistán durante la guerra contra la invasión soviética, portada de National Geographic más tarde. McCurry es un fotógrafo de técnica impecable, pero sobre todo es una persona capaz de captar a través de su objetivo el alma de las personas. «Si sabes esperar la gente se olvidará de tu cámara y entonces su alma saldrá a la luz» suele decir el fotógrafo.

En alguna entrevista, el fotógrafo estadounidense Steve McCurry ha explicado que sus abuelos tenían en casa una gran cantidad de revistas Life, y que, a él, con 12 años, le fascinaba hojearlas y recuerda especialmente fotos de monzones en India. Tal vez sus abuelos despertaran su vocación. Muchos años después, el fotógrafo ha vuelto a detenerse en captar a los abuelos.

Steve McCurry empezó en la Universidad del Estado de Pennsylvania, donde cursó estudios de cine e historia. Tras graduarse con matrícula en 1974, empezó su carrera como fotógrafo en un periódico de Filadelfia natal. Sin embargo, tal y como cuenta National Geographic, el mundo de los periódicos y las fotografías en blanco y negro se le quedó pequeño. Tras cuatro años en el diario empezó a trabajar como freelance con el objetivo de realizar reportajes sobre geografía, sociedad y política para revistas.

El mismo año de la publicación de la foto de la niña afgana, McCurry fue premiado con varios galardones, incluidos el Fotógrafo de Revistas del Año, otorgado por la National Press Photographers Association, y cuatro primeros premios en el World Press Photo. También ha sido galardonado con la Medalla de Oro Robert Capa y el Premio Olivier Rebbot Memorial en dos ocasiones distintas.

Esta leyenda de la fotografía también se ha visto envuelto en el escándalo cuando se descubrió que algunas de sus fotografías estaban editadas. Una técnica admitida en la fotografía artística y publicitaria, pero no en el fotoperiodismo y la fotografía documenta. El autor de la niña afgana reconoció haber usado Photoshop. La agencia Magnun retiró alguna de sus fotografías por este motivo.

Más allá de ese asunto, lo que resulta innegable s queMcCurry es capaz de sacar hacer que sintamos empatía con el personaje que tenemos enfrente, de acercarlo, y de dar esperanza incluso en las situaciones más complidadas.

una sonrisa en situaciones tan complicadas como la de la guerra o la miseria, sacar un rayo de esperanza donde no lo hay y convertir al personaje que tenemos enfrente en alguien cercano

Steve McCurry ha publicado numerosos libros con sus fotografías y ha organizado también muchas exposiciones. En ocasiones temáticas. Aunque aún no sobre los abuelos.