La creación de un Ministerio de Juventud e Infancia, que dirigirá Sira Rego (Sumar), vuelve a poner de actualidad una pregunta que ya se hicieron algunas organizaciones de la sociedad civil en 2019: ¿es necesario contar con un Ministerio de Mayores que dirija las políticas que afectan a más de nueve millones de personas en España?
En aquel momento, en 2019, no había consenso. Por una parte, la patronal de la Dependencia CEAPs (@cea_ps) y algunos expertos entendían que podía ser positivo para coordinar las políticas relacionadas con las personas de más de 65 años y que este grupo tuviese más protagonismo en la agenda pública.
No obstante, los mayores no lo veían tan claro. En concreto, la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (@CEOMA_ong) y la Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados (@MayoresUDP), dos de las entidades más representativas del país, miembros del Comité Asesor de 65YMÁS, no compartían la opinión de la organización empresarial.
"Nuestras reivindicaciones no son aisladas. No queremos instituciones o ministerios específicos que aíslen las políticas orientadas a las personas mayores y/o con dependencia del resto de la sociedad", aseguraban.
Este diario ha querido volver a preguntar a los mayores si hubieran considerado oportuno crear un ministerio propio, ahora que el nuevo Gobierno ha incluido uno específico de Infancia y Juventud –la pasada legislatura era el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 el que se encargaba de estos temas, a través de la Dirección General de Derechos de la Infancia y Adolescencia y del Instituto de la Juventud–.
Para Lázaro González, presidente de la Plataforma de Mayores y Pensionistas (@PlataformaPMP), que representa a más de 5.746.000 afiliados y a las principales asociaciones del país, sigue sin ser necesario tener un Ministerio de Mayores.
Lo importante, asegura, es que los problemas que afectan a los mayores se aborden de forma transversal por parte de todo el Ejecutivo –Derechos Sociales, Sanidad, Seguridad Social, Hacienda, Transformación Digital, etc.– y que siempre se tenga en cuenta la opinión del colectivo a la hora de adoptar medidas. "Lo relevante es que se hagan buenas políticas de mayores y con los mayores", comenta.
Además, pide al Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso), el organismo que actualmente debe coordinar las políticas relacionadas con el colectivo de personas de más de 65 años, que "cumpla" con sus compromisos, tome un papel protagonista y defienda los intereses de este grupo.
Para ello, explica González, es esencial que este organismo público impulse esta legislatura, como medidas prioritarias, la tan esperada Estrategia Nacional contra la Soledad, un problema que afecta al 13,4% de la población en España –sobre todo a los mayores–, un Pacto Estatal sobre Cuidados, que fomente la atención centrada en las personas y cuente con un gran consenso entre las principales fuerzas políticas y administraciones.
"Es necesario tener un Ministerio"
Ahora bien, no todos comparten el parecer de las principales organizaciones de mayores. Carlos San Juan, conocido por su lucha contra la exclusión financiera y por la campaña 'Soy Mayor, no idiota', entiende que sí es necesario crear un ministerio propio.
"Desde el momento en que hay uno de Infancia y Juventud, es necesario, en un Gobierno progresista que lucha por la igualdad, tener un Ministerio de Mayores", asegura.
"Lo tienen cada vez más países, porque el futuro demográfico va a hacer que vayamos a ser la generación más numerosa", argumenta.
"Tenemos múltiples problemas y no sabemos a quién dirigirnos. Y el considerar al Imserso, que se caracteriza sólo por la organización de viajes, como representantes de casi 10 millones de mayores, es un anacronismo", opina.