La indignación de los padres lleva al Gobierno a rectificar y permitirá que los niños puedan pasear

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha comparecido esta tarde para arreglar el desaguisado. La decisión del Gobierno de permitir la salida de niños a la calle acompañados de un adulto solo para ir al supermercado, a la farmacia, al banco, a comprar el pan o el periódico, es decir, para alguna de las actividades ya establecidas en el Real Decreto del 14 de marzo, por el que se declara el Estado de Alarma por la pandemia del coronavirus COVID-19, ha desatado a lo largo de toda la jornada la críticas de los padres, que han tachado de "irresponsable" y de "error" la medida. Lo que ha hecho que a última hora de la tarde, el Ejecutivo se viera obligado a recular y a permitir que los más pequeños puedan pasear con sus padres.

Así, el ministro de Sanidad ha anunciado, tras matizar que es "un Gobierno que escucha" (en clara referencia a las críticas recibidas a lo largo de la jornada), que este próximo fin de semana emitirá una orden que permitirá a los menores de 14 años dar paseos a partir del próximo domingo 26 de abri. De esta forma ha rectificado la medida anunciada por la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, que limitaba las salidas a acompañar a los adultos a realizar tareas esenciales, como ir al supermercado.

Y es que distantas asociaciones de familias han mostrado su rechazo a la propuesta anunciada por la mañana tras en Consejo de Ministros. Así, el Foro de la Familia tachaba de "irresponsable" la medida del Gobierno pues consideraba que "pone en riesgo" tanto a los menores como al resto de ciudadanos, y le pedían que "recapacitara" y permitiera a los niños dar "paseos cortos".

Tampoco estaba de acuerdo con la medida la Federación Española de Familias Numerosas (FEFN), que calificó la decisión de "completo error". "Llevar a los niños a la compra no es lo más seguro y choca frontalmente con el objetivo principal que debería perseguir esta medida, que es permitir a los niños estar al aire libre para garantizar su correcto desarrollo físico y mental tras semanas encerrados entre cuatro paredes", advertía la vicepresidenta de la FEFN, Ana Cía.

Para la FEFN, que se permita a los niños ir al supermercado o a la farmacia no tenía "ningún sentido" porque ellos "necesitan respirar aire fresco y tomar el sol". Además, añadía que en estos espacios cerrados "hay mucho más peligro de contagio". "Un supermercado es una zona de riesgo, especialmente si hablamos de niños pequeños que se mueven mucho y no es fácil controlar que no toquen las cosas", explicaba Cía.