El envejecimiento de la población es una tendencia que se repite en gran parte de los países occidentales debido a diferentes problemas como la baja natalidad o la decisión de los jóvenes de abandonar sus pueblos o ciudades de origen en busca de vivienda u oportunidades de trabajo.
Como muchas otras ciudades, Donostia envejece, pero resulta evidente que el peso de la población mayor allí es importante. Esta situación genera una necesidad para que se adopten medidas con las que poder atender de la mejor forma posible a este segmento de la población cada vez más vulnerable, sobre todo en la situación de pandemia que estamos viviendo.
Es por esto que el Ayuntamiento de Donostia (@Ayto_SS) ha puesto en marcha varios proyectos, como fue el programa Lagunkate dirigido a obtener información sobre el estado de las personas mayores de 65 años que vivían solas o con personas de más edad (ya finalizado) para dar apoyo a las personas mayores.
Goizaldiak
Se trata de un servicio de atención diurna que tiene como objetivo de contribuir al mantenimiento de la autonomía de personas mayores frágiles, a su permanencia en su entorno habitual y su socialización tomando parte en distintas actividades individuales y grupales que favorecen que mantengan su salud física y cognitiva, lo cual mejora a su vez las posibles situaciones de aislamiento.
El servicio se presta en diferentes centros donde se ofrecerán actividades grupales específicas como gimnasia adaptada, taller de relajación, terapia manual, talleres lúdicos, de memoria y de audiovisuales, musicoterapia y otras prácticas destinadas a favorecer el envejecimiento activo y a mantener relaciones sociales para mejorar la calidad de vida.
La diferencia con los centros de día de gestión foral es que el público objetivo es distinto al tratarse de mayores que no muestran el mismo grado de deterioro a distintos niveles.
Dónde y cuándo
De momento, estos son los locales donde se prestan los servicios:
-
Asociación Egiatarra en Egia (C/ Duque de Mandas, 48, bajo)
-
Asociación Guardaplata en Bidebieta (C/ Serapio Múgica 21)
-
Asociación Casa Nao en Alza (Plaza San Marcial,5)
-
Gros: Local municipal. Nafarroa Behera, 7
Se realizan de lunes a viernes en horario de mañanas entre las 10:00 y las 13:00 horas y a lo largo de todo el año, a excepción de los periodos vacacionales.
Requisitos
Como criterios generales, las personas que quieran solicitar este servicio tendrán que cumplir los siguientes requisitos:
• Estar empadronada en Donostia /San Sebastián al menos 12 meses continuados inmediatamente anteriores a su solicitud.
• Tener 65 o más años.
• Ser autónoma frágil o con dependencia moderada (Grado I de BVD hasta 39 puntos)
• Encontrarse en situación o en riesgo de padecer aislamiento, soledad, abandono, trato inadecuado.
• Requerir apoyos de baja intensidad para la cobertura de las necesidades atendidas por el servicio.
• No rechazar el tratamiento que corresponda, en caso de padecer una enfermedad infecto-contagiosa y/o enfermedad mental.
• No padecer trastornos de conducta y/o presentar comportamientos que puedan perturbar gravemente el funcionamiento del servicio o la normal convivencia en el mismo o que supongan riesgo para la propia persona, para otras personas usuarias o para las y los profesionales.
• No precisar una asistencia sanitaria especializada y/o permanente fuera del alcance y posibilidades de las dotaciones propias del servicio.
• Abonar la aportación económica al coste del servicio que le corresponda.
• Asistir con regularidad a las actividades del servicio y, en caso de ausencia, comunicar a la persona responsable que no se acudirá a la sesión o sesiones. y, si es posible, comunicar el período en el que se prolongará la ausencia.
Cuesta dar el paso
"Este servicio diurno pretende contribuir a que personas que están en situación de soledad tengan un rato de entretenimiento o propiciar una red de contactos a personas que, por ejemplo, al quedar viudas se han quedado sin ese respaldo convivencial y deciden quedarse en casa", explicaba la concejala de Servicios Sociales, Aitziber San Roman al diario Noticias de Gipuzkoa. Añadía: "Se busca que congnitivamente se mantengan activas y, si se detecta un inicio de deterioro, se intenta ralentizar con propuestas diversas de su gusto, como crucigramas, lectura de prensa u otras. El objetivo fundamental es que no se queden encerradas en casa y que puedan tejer nuevas redes".
Aunque se trata de un recurso considerado de gran interés por el Ayuntamiento, está costando que termine de cuajar. "Nos cuesta reconocernos vulnerables y reconocer a veces que estamos solos o mal", comentaba San Roman en referencia a los motivos de por qué está costando que el servicio tome buen rumbo. "A veces es duro reconocer esto a los familiares y lo hacen ante la peluquera del hogar del jubilado o la farmacéutica". "La fragilidad puede ser por empezar un deterioro o por soledad no deseada. Hay que aclarar que los mayores pueden optar a una soledad deseada", insiste.
San Roman insiste en que "cuesta" que las personas mayores "den el paso", una vez que lo hacen "repiten". A Goizaldiak se llega bien porque los servicios sociales se lo proponen a la persona (porque lo detectan o lo sugiere un vecino, el servicio de ayuda a domicilio, la farmacia o también el médico o médica de cabecera) o porque la propia persona o sus familiares consideran que es un recurso de interés y lo solicitan: "Hay distintas antenas, y luego se pone la máquina en funcionamiento".
El Ayuntamiento ya se está planteando nuevas fórmulas que hagan más accesible este servicio: "Proponemos que en vez de cinco días de la semana sean tres, pero intentando llegar a ocho barrios". "Tiene que ser un servicio sí o sí de cercanía", subraya San Roman.