Guillermina y Raúl, un “tándem perfecto” que arrasa en Instagram y YouTube

Ella cocina y él explica. Ese es el lema de esta pareja de madre e hijo que se han convertido, con @cocinaconmimadre, en una de las cuentas de cocina más seguidas por su desparpajo y cercanía con sus seguidores.

Guillermina García, a sus 68 años, ha descubierto en las videorecetas y las redes sociales un ambiente que le ha sorprendido mucho y para bien. Lo que comenzó como un proyecto para poder pasar más tiempo con su hijo Raúl Martín, ahora es una plataforma con más de 13 mil suscriptores en YouTube y 31 mil seguidores en Instagram. Gracias a ellos, muchos usuarios han aprendido cómo preparar diferentes platos o trucos tan útiles como eliminar el tomate de los tuppers.

A diferencia de otros perfiles, ellos no suben contenido todos los días. Tampoco recrean las recetas virales que circulan por TikTok. “Estas son las de casa”, han explicado a 65YMÁS. Su fórmula tiene personalidad, disfrutan compartiendo el contenido y, además, señalan que es una forma de visibilizar que la gente mayor también puede enseñar lo que sabe y hace en Internet.

Con su simpatía, recetas y consejos, han creado una gran comunidad que espera con ansias que llegue el domingo para ver el vídeo de la semana. Entre ingredientes y cocciones, Raúl y Guillermina se muestran tal y como son: “Se ve como si estuvieras en medio de la misma cocina”.

Todo empezó con dos gorros

Guillermina siempre ha cocinado mucho. Por eso, hace cinco años, Raúl decidió regalarle dos gorros de cocinero por Navidad. Cada uno tenía escrito dos de las palabras que hoy son su marca y seña de identidad: en el primero se leía “Cocina con” y lo completaba el segundo con “mi madre”. En este simpático gesto está el germen de la cuenta.

“Tenía un potencial desaprovechado”, cuenta Raúl sobre su madre. Esto no solo hace referencia a sus dotes culinarias, sino también a su personalidad. Todo lo que ocurre en la cocina se ve en la pantalla, no ocultan nada, ni siquiera los tropiezos o las apariciones fugaces del marido de Guillermina y padre de Raúl.

Desde el inicio, reciben continuos mensajes de cariño. “Llegar a gente así es bonito”, subraya Guillermina. Recuerdan con especial emoción cuando una chica les contó que su madre, ya mayor y que no podía salir de casa, disfrutaba viéndolos y pedía que le pusieran sus vídeos. Estos comentarios son uno de los efectos del éxito que más les ha llegado y emocionado.

La comunidad que han creado es amplia. Cuando Guillermina va al mercado, las vecinas la reconocen y aplauden su contenido. “Yo te sigo” o “tu hijo es un encanto” son algunos de los comentarios que recibe. “No me imaginaba que nos iba a ver tanta gente”, asegura ella.

La importancia de valorar a los mayores

El proyecto de Cocina con mi madre les ha permitido lanzar un importante mensaje a la sociedad. Los mayores tienen mucho que aportar y enseñar. Por ese motivo, animan a todas las personas que no han tenido la posibilidad de formarse o hacer cosas que siempre han querido hacer a utilizar las redes sociales como herramienta para compartir conocimiento y difundir lo que su experiencia les ha enseñado.

Con el crecimiento que han vivido, han podido saltar a otros medios a los que no esperaban llegar. Uno de los hitos más importantes para ellos ha sido su colaboración con la televisión local de Badalona. Cada mes, disponen de un espacio en el canal local para seguir difundiendo la cocina de su madre y el buen rollo familiar que transmiten.

“Hay que aprovechar a los mayores y hacerles felices”, es la otra reflexión en la que incide Raúl. Su relación madre-hijo se ha reforzado gracias al tiempo que pasan juntos. Ambos disfrutan grabando y comunicándose con su comunidad, con la que comparten contenido cotidiano que va más allá de la cocina.