Dedicar más tiempo del recomendado a practicar ejercicio podría estar relacionado con una vida más larga, según un nuevo estudio publicado en la revista académica Circulationde la Asociación Estadounidense del Corazón, que ha asociado este aumento de actividad física a una reducción por muerte prematura.
Los expertos recomiendan un mínimo de 150 a 300 minutos de actividad física moderada a la semana (MPA), un mínimo de 75 a 150 minutos de actividad física vigorosa a la semana (VPA), o una combinación equivalente de ambas, así lo recuerdan los investigadores del estudio. Sin embargo, no había datos claros que indicasen lo que provocaba una mayor actividad (tanto VPA como MPA) a largo plazo.
Ahora, tras esta investigación, que ha analizado a más de 116.221 adultos, los participantes informaron sobre sus actividades en su tiempo libre, que repitieron hasta 15 veces durante el seguimiento. De los datos recogidos, los investigadores estimaron que había una asociación entre el tiempo y la intensidad del ejercicio con la tasa de mortalidad.
Así, durante los 30 años que duró el seguimiento, se detectó que entre los participantes se producía una reducción de la muerte prematura en aquellas personas que se habían ejercitado más de lo usualmente recomendado, en concreto casi el doble de tiempo.
En concreto, esta reducción de la tasa de mortalidad se detectó en aquellas personas que declararon realizar entre 150 y 300 minutos de actividad física vigorosa a la semana, o entre 300 y 600 minutos de actividad física moderada en el mismo periodo de tiempo, o una mezcla equivalente de ambas.
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.