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Helena Resano (@helenaresano) ha pasado de contar todos los días en televisión el drama de la pandemia del coronavirus a sufrirlo en sus propias carnes. Tanto ella como toda su familia. Ocurrió este septiembre, a la vuelta de sus vacaciones de verano y, ahora ha relatado cómo ha sido su experiencia. La presentadora de La Sexta Noticias, que aún continúa en casa confinada por las medidas del protocolo de Atresmedia, permaneció asintomática, pero la peor parte se la llevó su hija, a la que el virus golpeó con especial fuerza.
"Acababa de cumplir 18 años y estuvo francamente mal. Con fiebre muy alta y apenas se podía mover. La teníamos que mover entre mi marido y yo, y también bañarla. Se dormía constantemente y tenía muchos dolores. Afortunadamente tengo un hermano médico y amigos que nos iban guiando un poco por teléfono, pero hubo un momento en el que pensamos que no iba a remontar", ha asegurado Resano durante una conversación en directo con su compañera Mamen Mendizabal en el programa Más vale tarde. "Al tercer día le empezó a bajar la fiebre y a recuperar fuerzas. Con 18 años estuvo muy mal. Era una niña sana, sin patologías ni nada", ha añadido la periosta sobre su hija antes de relatar el "larguísimo" proceso que ella y su familia pasaron durante su comunicación con la sanidad pública.
La historia comienza un lunes, día en el que su hija empieza a presentar síntomas parecidos a "un catarro o unas anginas". Así, ella y su marido deciden llevarla al ambulatorio. "Nos riñen porque dicen que por unas anginas no tenemos que llevarla, pero inmediatamente le hacen la PCR", ha asegurado. A la vez, Resano informa de su situación a Atresmedia, que por cuestiones de protocolo le realiza una PCR cuyo resultado se sabe a las 24 horas: es positiva asintomática.
Y nuestro caso no ha sido un caso aislado. Faltan rastreadores, falta inmediatez a la hora de conocer resultados. https://t.co/wvZqRYktwI
— Helena Resano (@helenaresano) September 16, 2020
Gracias a la rapidez de los resultados, Resano y su familia se confinan mientras esperan los resultados de la prueba de su hija, que tarda hasta cinco días en llegar. "Y en esos cinco días nadie se pone en contacto con nosotros. No sabemos nada, no hay un rastreador y, por supuesto, tampoco se pone en marcha el rastreo de las otras dos personas que viven en este núcleo familiar", ha denunciado la presentadora, que finalmente el viernes recibe la confirmación de que su hija también ha dado positivo. Es el lunes cuando su marido y su hijo pequeño se someten también a la prueba, cuyos resultados no conocen hasta pasados 8 días. Tiempo en el que "no hubo un rastreo ni una llamada de un rastreador, solo dos llamadas de nuestra médico de cabecera", ha lamentado.
Según la periodista, en su centro de salud "están colapsados, no dan abasto. Están haciendo miles de horas, pero vives y compruebas que todo es trabajo y todo ese desgaste de personal y de medios no está sirviendo para nada" por la falta de rastreadores. Por eso, ella ha dado las gracias al protocolo de Atresmedia y a la rapidez en comunicar los resultados de su PCR, pues "eso nos ayudó a confinarnos" y a "avisar a nuestros propios contactos".
La presentadora lleva desde el 31 de agosto en su casa, mientras que su marido y sus hijos recibieron este martes el alta y ya están desconfinados. "En mi caso tengo que aguantar un poco más, porque, afortunadamente también, el protocolo de nuestra empresa es más estricto y nos piden una serie de pruebas para protegernos a todos en Atresmedia", ha dicho para, acto seguido, señalar que en las últimas pruebas a las que ha sometido sale que ya tiene anticuerpos y que no tiene activo el virus, "pero la PCR sigue dando positivo, así que de momento me quedan unos cuantos días para volver a estar por ahí con todos vosotros".