El horror de Vitalia Home Leganés, la residencia con 96 muertos: "No nos han dado el pésame"

Fondos y grandes fortunas manejan las residencias de mayores en España

La residencia de Leganés (Madrid) del grupo Vitalia Home (@Vitalia_Home), una de las empresas más grandes de la Dependencia en España (con 51 centros) y propiedad del gigante europeo CVC, fondo de capital riesgo británico, lleva desde mediados de marzo en el punto de mira de las administraciones y de la justicia. Es una de las 13 residencias intervenidas por la Comunidad de Madrid por el elevado número de fallecidos y la asociación del Defensor del Paciente la ha denunciado ante la Fiscalía de Madrid.

Los familiares y trabajadores llevaban tiempo avisando: la falta de personal y la inacción tienen consecuencias. Y, desgraciadamente, parece que así ha sido, aunque cabe reconocer que nadie se esperaba una situación tan dramática y pocos protocolos redactados antes de la pandemia podían prever este drama. Y es que, en este centro, que tiene capacidad para 266 personas, ya han fallecido, según datos aportados por familiares, 96 residentes.

"Casi 100 muertes en un mes"

Los decesos fueron constantes durante la última quincena del mes de marzo. "Al principio, a falta de test, se trasladaba a algunos residentes al hospital y fallecían allí", cuenta Isabel, una auxiliar del centro que está actualmente de baja por coronavirus y cuyo contacto fue facilitado por el sindicato CCOO Madrid (@CCOO).

Otros, relata, "se recuperaban y les mandaban a la residencia, pero empeoraban de nuevo y morían y, luego, los había que fallecían en el propio centro, sin pisar el hospital". Mientras, decenas de familiares "colapsaban las líneas de teléfono" para saber qué había sido de su ser querido, recuerda.

Por su parte, los familiares detallan que a comienzos del mes de abril, tras visitar la UME sus instalaciones, "el centro fue intervenido por parte de la Comunidad que colocó a un funcionario, un gestor de un centro de día de Fuenlabrada, como enlace entre Vitalia Home y la administración autonómica".

No obstante, "este cambio en el organigrama no supuso una gran mejoría", según familiares consultados, "al menos en lo que tiene que ver con el aumento de personal para atender a los residentes infectados o a la llegada de material de protección", explica a 65Ymás Laura Espallardo, una familiar miembro del Comité de Familiares del centro.

De igual manera, la dirección sigue siendo la misma, aunque, según los trabajadores, la propia directora, que lleva pocos meses en el centro, está en cuarentena y "teletrabaja".

También han recibido críticas el CEO de Vitalia Home, Chema Cusculluela, y el alcalde de Leganés, Santiago Llorente (PSOE), por parte de familiares. Tras saltar el escándalo y darse por controlada la situación, el CEO y el alcalde acudieron a la residencia, algo que indignó a los familiares. Estos les criticaban que hubieran acudido a "hacerse la foto" y no a "dar explicaciones". Asimismo, le reprochaban que aún no les hubieran dado el pésame a las 96 familias.

Quizás viene el Sr. Cusculluela a dar el pésame que aún no han dado a las 96 familias? Viene a dar la cara? Nos preguntamos si la Sra Directora hoy si estará en la residencía para la fotito o seguirá teletrabajando.

— Comité Familiares Vitalia Leganés (@ComiteF_Vitalia) April 17, 2020

Con todo, lo que sí que se hizo, a principios de abril, es habilitar una residencia de la empresa (en el barrio de Moratalaz) que estaba cerrada y derivar allí a los mayores sin síntomas, además de hacer más de un centenar de test. Aun así, esta segmentación y separación de usuarios no tuvo los resultados esperados y varios residentes, que "habían dado falsos negativos", tuvieron que volver de nuevo a Leganés al desarrollar la enfermedad. 

Ahora, se podría decir que la situación se ha estabilizado en Vitalia Leganés, una residencia por la que ya han pasado el "Ejército, Médicos sin Fronteras y los bomberos". "La última persona falleció el martes pasado", sostiene Laura.

Así, los mayores contagiados siguen en Leganés y los "sanos", instalados provisionalmente en Moratalaz. Sin embargo, no todos los problemas se han resuelto y el más importante de todos, según denuncian varios familiares, es la falta de información por parte de la empresa, que continúa. Según aseguran, actualmente les notifican periódicamente por WhatsApp de la "saturación de oxígeno" y "temperatura" de sus familiares y algunos pueden hablar por videoconferencia aunque, matizan, es algo que se ha conseguido tras "exigirlo en una reunión con la dirección".

Pese a todo, la información que se da a las familias es, a veces, confusa, según Laura. "Estamos notando que nos envían mensajes con las saturaciones inventadas. A una familiar le mandaron la temperatura de su madre cuando ella estaba en el hospital", critica.

Asimismo, denuncia que a los mayores se les ha trasladado dejando parte de sus pertenencias en las habitaciones. Por ejemplo, en el caso de su madre, tras reestructurar el centro de Leganés, "han metido a una señora" en su habitación. "Nos parece una medida insensible e indigna", comenta.

Además, explica, la deshumanización es tal que la mayoría de veces les llaman "sólo para pagar facturas, como el caso de una familiar que le pidieron dos euros cincuenta por un paracetamol y ni siquiera les han dado el pésame".

No es un caso único

"Si esto que ha pasado no nos sirve para cambiar, vamos mal", sostiene Isabel (auxiliar del centro). De esta manera, la trabajadora reconoce que ni la empresa ni la administración tomaron medidas a tiempo y que las "infraestructuras se han podido ver desbordadas", pero también, añade, no se debe analizar este caso por separado, puesto que lo que les ha pasado es algo más generalizado. "Cómo esto lo veamos sólo como casos concretos, el futuro va a ser malo", apunta.

De igual modo, la auxiliar reconoce que el hecho de que no haya habido los suficientes test a tiempo ha influido en cómo se han desarrollado los hechos. "No se puede decir que los separemos, si no se puede", apunta.

"Falta de transparencia"

Por su parte, la presidenta de la asociación del Defensor del Paciente, Carmen Flores, que ha llevado ante la Fiscalía lo ocurrido en la residencia de Vitalia Home, asegura a este medio que lo peor de este caso ha sido "la opacidad total" por parte de la empresa y su "negativa a dar explicaciones".

La empresa se defiende

“Nosotros no vamos a dar cifras de los fallecimientos, porque las muertes las tenemos que hablar con los familiares, pero los datos que da la coordinadora de familias de Leganés son radicalmente falsos”, asegura Chema Cosculluela, presidente de Vitalia Plus, la empresa matriz del grupo, quien denuncia “un interés especial en culpabilizar a las residencias para evitar reconocer que la red sanitaria ha sido insuficiente para absorber la punta de los contagios”. Y pone como ejemplo los casos de cuatro enfermos que enviaron a hospitales en Madrid y Barcelona en cuatro ambulancias y por culpa del triaje los devolvieron a sus residencias.

Cosculluela reconoce que han cometido “fallos de comunicación al inicio de la crisis, y pedimos perdón por ello a los familiares, reaccionamos tarde en la comunicación, pero no hemos escatimado en la atención a los residentes. De hecho, el 85% de residentes del grupo en toda España no ha sufrido ningún tipo de contagio, y del 15% que sí se ha contagiado, la mayoría se está recuperando”.  En las residencias mantienen aislados a los enfermos absolutamente, y los que salen del hospital van a la zona de prevención durante 15 días, para evitar contagios.

El presidente de Vitalia se defiende de las críticas aclarando que han contratado a unas 700 personas para sustituir a los empleados de baja y para dotar los centros medicalizados, sin escatimar dinero. “Estamos pagando un plus de casi el 20% a nuestro personal, con un coste de un millón de euros, y hemos gastado otro millón en comprar material. Cosculluela asegura que la residencia de Moratalaz y la de Leganés tardarán en volver a la normalidad, porque hay contaminados, pero otras como la de Moratalaz o Las Rozas están limpias.

Finalmente, por parte de la Comunidad de Madrid aseguran que no dan datos de una residencia en concreto, sólo globales.