Desde las elevadas alturas del dron, los espectadores no pueden apreciar exactamente qué es ese remolino que da vueltas en círculos sin parar. A medida que el dispositivo se acerca, vemos que se trata de una manada de renos. El fotógrafo ruso Lev Fedeséyev captó esta danza giratoria en el pueblo de Lovózero de la provincia de Múrmansk, al noroeste de Rusia. Las imágenes no han pasado desapercibidas para los usuarios en redes sociales quienes, asombrados, piensan que quizá se trata de algo puntual, pero lo cierto es que este comportamiento de los reyes del hielo es más común de lo que parece.
No se han vuelto locos, ni tampoco se trata de señales alienígenas. Tal y como informa el periódico ruso 'Rossíiskaya Gazetapero', los zoólogos afirman que los llamados ciclones de renos son un instinto de defensa. Suelen ser presa de los lobos de la zona, por ello, los animales protegen a los más débiles de la manada formando un círculo alrededor: en el centro se encuentran las hembras y las crías, mientras que los machos protectores se colocan en el exterior. El diario también sostiene que esta práctica es habitual en otros animales como los bisontes.
Estas imágenes han sido captadas durante el proceso de vacunación contra el Ántrax en las problaciones de renos de Lovózero. De camino a los corrales e, incluso, dentro de ellos, los animales se vieron amenazados y formaron la espiral.
No es la primera vez que esta danza se hace viral. En el año 2018, el productor cinematográfico Andrei Golovnev, impactado por la escena, grabó a varias manadas de renos girando en círculos en la Península de Kola, al norte de Rusia. Un ejemplo más de que los fenómenos de la naturaleza animal no dejan de impresionar al ser humano.