¿Trump o Biden?: Los jubilados podrían decidir la victoria en las elecciones de EEUU

Pase lo que pase tras las elecciones de Estados Unidos, hay una cosa clara: el futuro presidente será septuagenario y uno de los más sénior de la Historia. Gane el republicano Donald Trump (74 años) o el demócrata Joe Biden (77), que ambos sean candidatos para dirigir un país independientemente de su edad, ya es una victoria, resaltaba Fernando Ónega en su tribuna de la jornada electoral en 65Ymás. "En España, desde luego, estarían descartados. Aquí ningún partido pondría a un septuagenario como candidato, ni siquiera a la presidencia de una comunidad autónoma", decía. 

Solventado ese paso y salvo ciertas alusiones de Trump a la mala salud de Biden, la edad parece que no será un obstáculo para llegar a la casa Blanca. A la espera de saber el resultado final de las elecciones del 3 de noviembre en una carrera ajustadísima que por el momento gana Biden, lo que se ha visto durante la campaña ha sido un esfuerzo de ambos candidatos por atraer al voto sénior, cada vez más decisivo por su peso predominante en todas las sociedades occidentales, incluida la estadounidense. Allí, pese a las grandes diferencias según el estado, cerca del 23% de los votantes son mayores, e igual que ocurre en otros países como España, suele ser el perfil de edad más fiel a las urnas. 

Los más fieles al voto, también por correo

"Como ocurre en nuestro país, el votante mayor es fiel y de fuertes convicciones democráticas, por lo que ejerce su derecho con mayor asiduidad que los votantes de otras franjas de edad. En este caso, el temor a la pandemia ha hecho aumentar el porcentaje de voto por correo hasta llegar a los dos tercios de votos emitidos totales, es decir, ha más que duplicado los votos por correo de la elección anterior. En este caso la población de mayor riesgo ante posibles contagios ha sido quien más ha aprovechado esta opción del voto por correo y ha asegurado que los niveles de participación de la población mayor estadounidense siga siendo igualmente alta", opina Javier Lorenzo (@javilor), analista y profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Carlos III de Madrid (@uc3m). 

Según los datos de las anteriores elecciones, aproximadamente el 68% de los ciudadanos de 65 o más años acudió a las urnas, siendo la participación más alta entre cualquier grupo de edad, seguida de los personas entre 45 y 64 años. Sin embargo solo el 37% de los jóvenes de 25 a 34 años llegaron a las urnas hace cuatro años, cifra que se redujo al 30% entre los mayores de 18 a 24 años. "El voto de los mayores es tan decisivo como en cualquier elección, especialmente en algunos estados en donde la población de dicha edad alcanza cotas altas o puede inclinar la balanza en favor de unos o de otros, como en los estados de Pensilvania, Michigan o Wisconsin entre los estados del norte o Florida, Arizona, North Carolina, Georgia o Texas entre los del sur, por ejemplo", opina Lorenzo. 

 

Florida, un estado decisivo

Florida ha sido históricamente un estado clave: desde 1924 solo en dos ocasiones el candidato que ha perdido en Florida ha llegado a la presidencia y desde 1992 quién gana en Florida llega a la Casa Blanca. Pero es que además, este estado sureño con una amplia presencia latina es, desde hace décadas, el lugar soñado por los norteamericanos para su jubilación dorada, por lo que el 30% del electorado es mayor de 65 años. Por eso los últimos esfuerzos de campaña de Donald Trump y Joe Biden se han centrado este estado donde ambos celebraron convenciones.  Su importancia radica en que el que gana en Florida se lleva los 29 delegados, lo que significa más de un 10% del total del país. 

Todo apunta a que según los últimos datos Donald Trump habría conquistado Florida, pese a la ligera victoria para Biden que vaticinaban las encuestas. La clave del éxito de Trump en este estado podría estar relacionado con el tradicional voto conservador de la comunidad cubana en el exilio, muchos de ellos mayores. "Tienden a mostrar un rechazo mayor ante el partido demócrata porque lo consideran “blando” o con políticas migratorias más flexibles que el partido republicano", explica Javier Lorenzo, quien cosidera que en este caso han podido cobrar fuerza las propuestas de la construcción del muro con México de Trump y su rechazo a cualquier diálogo con Cuba o Venezuela. Pero los expertos invitan a seguir de cerca los resultados de los estados más críticos o competitivos, los denominados “swing states”, literalmente, aquellos que pueden bailar y donde el resultado es más competido.

¿A qué candidato prefieren los mayores?

En todas las elecciones presidenciales desde 2004, los estadounidenses mayores de 55 años fueron el contrapeso del Partido Republicano a la fuerza demócrata entre los votantes más jóvenes, según los analistas de Brookings Institute. Son los votantes mayores los que mantuvieron a los republicanos competitivos y llevaron a la victoria de Donald Trump en 2016, a pesar de perder el voto popular. Pero esto podría estar cambiando en estas elecciones ante el impacto de la pandemia. "En una elección tan disputada todos los votos cuentan y en las pasadas elecciones el votante de más de 65 inclinó su balanza sobre Trump por encima de Hillary Clinton", explica Lorenzo, mientras resalta que en esta ocasión podría darse un vuelco.

Según los sondeos y estimaciones de última hora, el voto de los mayores de 65 en estas elecciones ha dado la vuelta y la intención de voto a Biden doble en posibilidades a la intención de voto por Trump. La última encuesta de CNN/NBC/The New York Times, un 60% de los mayores de 65 años apoyarían a Biden, siendo sus mayores defensores junto con los votantes de entre 18 y 49 años. Por contra, solo el 39% de los encuestados reconoció su apoyo a la candidatura de Donald Trump y Mike Pence en octubre. Pero estos datos de intención de voto podrían variar en función del voto oculto. El resultado depende ahora de los resultados finales de los estados del “cinturón de óxido”, si los tribunales y Trump lo permiten.