José Luis Jordana Laguna es Secretario General de CEATE (Confederación Española de Aulas de la Tercera Edad), tiene 84 años y lleva más de 40 trabajando para los mayores y dirigiendo proyectos "muy ambiciosos e innovadores" a este colectivo. Ahora además es tiktoker (@elabueloinquieto) y, bajo el apodo de "el abuelo inquieto", comparte de forma habitual mensajes sobre la vejez que ayudan a jóvenes y mayores por igual. Así se lo hacen saber los más de 43 mil seguidores que ya tiene su cuenta de TikTok, con la que está teniendo un gran éxito y se ha convertido en todo un ejemplo a seguir.
"Toda mi vida he sido así. Desde joven me educaron y me enseñaron a tratar de ayudar a los demás y hacer feliz a la gente que te rodea", explica José Luis a 65YMÁS.
Fue en el año 1978 cuando traspasó su dedicación a los jóvenes al mundo de los mayores. "Yo ni siquiera sabía cómo se llamaba y se comía eso de la tercera edad. Pero me metí a fondo", asegura. "Siempre he sido un hombre de redes, y en aquella época escribía muchos artículos relacionados con los movimientos asociativos de mayores".
Por aquel entonces, José Luis controlaba más de 100 organizaciones de mayores de ámbito estatal, y ahora desde CEATE trabaja para "ayudar a los demás y enseñar a través de la formación permanente a lo largo de la vida, para que les ayude a seguir activos, participativos y útiles en la familia y la sociedad", y demostrar, desde la gerontología, que" vivir activamente, trabajando a favor de los demás, sin peligro de soledad no deseada, participando y actuando como un ciudadano más, estas personas mayores consiguen calidad de vida, bienestar personal y salud física y social".
José Luis explica que antes de empezar con TikTok estuvo con YouTube. "Por el año 2008 llevaba un blog muy potente (2.000 visitas diarias), el más visitado en España prácticamente, más incluso que el propio Imserso. Estaba reconocido en aquella época. Entonces recibí un premio, un reconocimiento por parte de la Fundación Pfizer al mejor blog que promovía la salud y hábitos saludables, y gané. Fue impresionante, un premio entregado en Zaragoza ante 500 científicos de todo el mundo".
"Empecé en YouTube con El abuelo inquieto, pero no veía mucha repercusión ni futuro", admite. "Entonces, por consejo de mis hijos, los tres informáticos, me metí en TikTok, una plataforma en la que los jóvenes sobre todo comparten vídeos bailando y haciendo cosas extravagantes para llamar la atención; pues yo entré con El abuelo inquieto y de repente vi que tenia una repercusión enorme, solo yo hablando a la cámara durante unos pocos minutos, casi siempre mandando mensajes gerontológicos".
Así, a un mes de empezar, "El abuelo inquieto" ya tenia 1.500 seguidores, más de 10.000 "Me gusta" y 150.000 visualizaciones. "Esto me animó y me entusiasmó muchísimo, sobre todo los comentarios tremendamente positivos", señala. Esas cifras se han disparado hoy en día, alcanzando los 43.000 seguidores, los 291.000 "Me gusta" y los 4 millones y medio de visualizaciones. Además de alcanzar su propio de récord del millón de visualizaciones en uno de sus más recientes vídeos en los que habla de cuándo se empieza a envejecer.
"Es todo un récord. Estoy emocionado", asegura. "Pensar que ha llegado este mensaje gerontológico a un millón de personas mayores y que les ayuda a vivir con salud y felicidad es para mi una enorme alegría y satisfacción, porque es utilizar una de las redes sociales más importantes para hacer el bien y ayudar a la gente mayor a vivir mejor. E intelectualmente te hace tener la mente activa".
"Muy bien dicho!!! Al fin algo bueno en TikTok", "Muchas gracias, hay tanta basura en esta plataforma que encontrarlo a usted ha sido un regalo", "Don José Luis, alma joven, lo admiro", "Yo de mayor quiero ser como tú", "Caballero, usted es un hombre ilustrado y lleno de conocimiento, por favor, siga compartiendo", "Sus consejos son buenos para todas las edades", son algunos de los comentarios que José Luis recibe y que le animan a continuar con su trabajo.
"Me estimula mucho porque ves que estás mandando un mensaje para que la gente viva el envejecimiento de forma equilibrada, de forma armónica, todo lo que yo he aprendido a lo largo de mi vida, y les es de utilidad".
¿Cuándo se empieza a envejecer?
José Luis explica que la gerontología le ha ayudado en gran medida, tanto en su vida personal como profesional, y eso es lo que quiere compartir, ahora a través de las redes sociales. "Me ha ayudado a envejecer y yo, como una especie de altavoz, he recorrido toda España en estos 41 años hablando a la gente mayor de cómo se tiene que vivir desde la gerontología para que el envejecimiento no se haga acelerado ni patológico, que sea equilibrado. También sobre la participación activa de los mayores en la sociedad como un deber, un derecho, y más aún, una necesidad. Y todo eso lo he llevado a las redes".
¿Cuándo se empieza a envejecer? Es una de las preguntas a las que más intenta José Luis dar respuesta en sus vídeos. "Yo siempre digo que se empieza a envejecer cuando dejas de moverte, porque envejecer es moverse cada vez menos. Si tu te mueves mucho, tienes mucha vida; si estás todo el día sentado sin hacer nada, esto empieza a oler mal y el muerto ya no se mueve más. Así de claro les hablo". Y añade: "Se comienza a envejecer cuando se deja de aprender, cuando uno pierde el interés y la curiosidad por el mundo que nos rodea. Se comienza a envejecer cuando se deja de amar, porque envejecer es irse quedando uno solo, y viene el gravísimo problema de la soledad. Se empieza a envejecer cuando se deja de salir de casa, porque envejecer es ir poco a poco aislándose de la sociedad y de la vida. Y se comienza a envejecer cuando se deja de reír, porque envejecer es irse uno dejándose llevar por el desanimo y la tristeza".
"Yo lo he sentido en mi a partir de los 75 años, y todo lo que he estado predicando desde la gerontología me lo estoy aplicando ahora", comenta. "Y bueno todavía lleno una vida autónoma, trabajo mucho las neuronas: me paso todo el día escribiendo, con proyectos, ilusionado, salgo a hacer gestiones a los bancos, a las imprentas, con mis compañeros de CEATE estamos muy activos, pero claro, te va afectando perder a la gente y las enfermedades de la edad".
Así es como José Luis comparte no solo estos mensajes, sino que también incluye algunos refranes populares españoles para hablar de la vejez, un tema en el que se ha especializado y con el que ha dado diferentes conferencias, demostrando que todos estos consejos dados por gerontológicos se parecen a lo que se dice en los refranes españoles y en toda la sabiduría popular. "Por ejemplo: El que va y viene, vida tiene. Insiste en la idea del movimiento".
Tampoco se olvida de aportar un poco de humor. "Yo estoy todo el día contando chistes", cuenta, y muchos de ellos los comparte también en TikTok. Ese humor, cuenta, le viene muy bien para aceptar también la otra cara de las redes sociales. "Tienes que tener cuidado con lo que dices, porque te arriesgas a que te te ataquen por todos lados. A veces yo tengo miedo de que, con tanta repercusión, un día me venga un palo", admite.
También tiene que soportar "algunos mensajes malos", pero asegura "me río de todo". "¿Qué vas a hacer? Las redes tienen sus cosas malas, por supuesto, pero en conjunto es muy bueno". “El que tiene un por qué para vivir, puede soportar cualquier cosa”, señala.
"La ventaja que tienen los vídeos de TikTok es que no te tienes que alargar. La mayoría son de 15 segundos, en ese tiempo lanzo yo un mensaje para reforzar esto que estoy diciendo, y tiene un impacto increíble. Y es sorprendente como un solo vídeo en una plataforma como esta puede llegar a tantas personas en todo el mundo. A veces me dicen que estoy todo el día hablando del TikTok, pero es que a mi el TikTok me ha dado vida", admite.
Atípico y utópico
José Luis explica que la gente lo ha bautizado como "el atípico y el utópico". "Utópico porque he sido un idealista y siempre trato de mejorar las cosas, ya sea hablando con la gente mayor, motivándolos, hablándoles con entusiasmo; o a través de mis libros, como El evangelio de las personas mayores, donde reflejo todo lo que yo he aprendido durante tantos años".
José Luis señala que este libro fue todo un éxito. "Se vendieron 10 mil ejemplares y ahora está agotado". Su trabajo como escritor es la razón por la que lo llaman atípico, y explica que, aunque escribe libros para mayores, también lo hace para niños, labor por la que ganó el Premio Nacional de Literatura Infantil en 1981. Pero no es el único motivo.
"Soy atípico porque no es normal que haya trabajado en la selva del Amazonas con 100 colegios a mi cargo, en una empresa minera en Perú, donde era encargado de la educación de los hijos de los mineros, que en 1978 venga a España a trabajar con la gente mayor, que sea secretario general durante tantos años, que lance los programas de voluntariado cultural para mayores para enseñar los museos y espacios culturales de toda España... Es decir, son cosas muy potentes".
Las 7 "P" del abuelo inquieto
José Luis se define como "un luchador", como una persona "optimista y feliz" que trata de "hacer felices a los demás", algo que consigue guiándose por sus siete "P", relacionadas con el mundo de los mayores.
En primer lugar está la Presencia, la Participación y el Protagonismo. "Nosotros llevamos más de 40 años luchando desde CEATE para que los mayores estén presentes en todos los aspectos de la dinámica social, y también para que participen activamente, y lo hagan siendo protagonistas de todo lo que les afecta". Y esos tres puntos suponen "la mejor Prevención del envejecimiento patológico y la mejor Promoción de la salud".
"Consideramos que el colectivo social de las personas mayores es el mayor Potencial que tiene la sociedad actual, y ese potencial está desaprovechado". Y por último está el Poder de los séniors: "Los mayores se convierten en el mayor potencial, entramos en la era de la longevidad, donde los mayores son cada vez más y más importantes".
Poco a poco se están consiguiendo eliminar los prejuicios asociados a la edad. "Las personas mayores son ahora un colectivo que está muy presente, también en las redes sociales", un espacio donde se trata "con mucho respeto" a los mayores, así lo considera José Luis, "sobre todo cuando hablan de los abuelos y abuelas". "No es un discurso discriminatorio", señala.
"La esperanza de vida ha aumentado, y la jubilación es el mejor momento para aprovechar ese tiempo, disfrutarlo, tratar de seguir trabajando en buscar una sociedad mas justa, más solidaria y más humana, y en eso estamos mucha gente y cada vez más. Pero todavía queda mucho por hacer, porque parece que los mayores siempre son los últimos".
Cada vez son más las iniciativas y proyectos que se llevan a cabo para tratar de reducir la brecha digital existente, sobre todo en lo que se refiere a las personas mayores, y aunque "no se ha hecho suficiente", sí que "hay muchas organizaciones de mayores y entidades que están continuamente haciendo cursos sobre ello". "Las redes sociales vienen empujando fuerte, y a los mayores nos viene bien aprender todo lo que podamos sobre el tema, porque al final todo gira en torno a eso ahora". "Es un potencial enorme, y hecho en falta que mucha gente se meta", añade.
En este sentido, José Luis considera que las redes sociales "ya no son solo cosa de jóvenes". "La gente está muy equivocada. El nivel en los mayores de 65 años es muy alto, la inmensa mayoría está metida en redes y funcionan con WhatsApp y el Gmail diariamente. Son cada vez más quienes las utilizan".
"Yo me siento el hombre más feliz del mundo al saber que lo que hago en las redes está ayudando a tanta gente, porque antes, cuando hablaba a cientos de personas mayores, la gente venía a decirme lo agradecidos que estaban, que les había dado ilusión de vivir. Esa satisfacción ahora la veo multiplicada gracias a TikTok, y es increíble. Porque, como decía, mi ilusión es poder ayudar a la gente", concluye.
Sobre el autor:
María Bonillo
María Bonillo es licenciada en Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad Carlos III de Madrid. Escribe principalmente sobre temas de sociedad. También tiene experiencia en comunicación corporativa de empresas como OmnicomPRGroup y Pentación Espectáculos.