José Luis Martín, el jubilado de 80 años, alumno de un curso de escritura creativa en UNED Sénior, que denunció hace unas semanas la discriminación por edad de esta universidad hacia su profesora, entregará este martes en el registro de la Universidad Nacional de Educación a Distancia las más de 50.000 firmas que ha recogido hasta la fecha a través de su petición en la plataforma Change.org. Pide al centro de UNED Madrid que rectifique su decisión de prescindir de su profesora por tener más de 70 años.
“Mañana entregaremos a la UNED nuestras firmas y esperamos que nos ofrezcan una solución. En menos de tres semanas 50.000 personas han apoyado nuestra petición y el curso está a punto de comenzar. No pueden ignorarnos ahora”, ha dicho José Luis Martín.
Pese a que es José Luis quien ha tomado la iniciativa, en esta campaña de recogida de firmas le apoyan los demás alumnos: 15 personas mayores que todas las semanas acudían al centro de Pozuelo de Alarcón, con sus deberes hechos. Este martes, en la entrega de firmas, le acompañarán cinco de sus compañeros. También estará su profesora, Pilar Ruiz Va, que se ha visto apartada fulminantemente por parte de la UNED a través de un correo electrónico este verano.
El impulsor de la petición asistirá mañana para entregar las firmas en la UNED acompañado de sus compañeros de clase, así como de la profesora afectada, Pilar Ruiz-Va, que quiere seguir impartiendo su taller. Sobre esta entrega de firmas, Pilar Ruiz cree que “la UNED debe reconsiderar esta decisión” y que “al eliminar a los mayores de 70, con toda su capacidad docente activa, desprecia la posibilidad de transmisión del caudal de saber acumulado a través de la experiencia docente por parte de los mayores de 70 años”.
Han solicitado a la UNED que alguien los reciba, pero la Universidad aún no ha confirmado si este martes se reunirán con ellos.
El impulsor de 'change.org/QueVuelvaPilar' considera que la decisión de la UNED es "injusta, arbitraria y discriminatoria". “Se nos llena la boca con luchar contra la exclusión de las personas mayores mientras excluimos a una profesora excelente por ser "demasiado mayor" para el puesto. Y hacemos caso omiso de las opiniones de sus alumnos, todos mayores de 65 también. No basta con manifestar lo importante que es la participación de las personas mayores en la cultura y el fomento de la autonomía y las actividades para nosotros. Hay que demostrarlo con hechos”.
