L.C. ‘Buckshot’ Smith es un oficial de policía de Arkansas (EEUU) de 91 años que, por ahora, no tiene intención de jubilarse. Ayudar a la gente es lo que más motiva a este veterano que se ha convertido en un auténtico icono de su ciudad natal, Camden. En una entrevista para la BBC, Buckshot afirma que, ante la pregunta de cuándo se va a retirar, la respuesta es clara: “Cuando Dios diga”.
Todo el mundo conoce a Buckshot en Camden. Cuando pasea por las calles que lleva protegiendo desde hace 56 años, cada dos por tres, le paran los vecinos. En una entrevista para Rainwater Holt & Sexton, el policía señala, entre risas, que ser tan conocido “me da alegría” porque, en ocasiones, “la gente me pregunta, ¿te acuerdas de mí hace 40 años”.
Buckshot se unió al cuerpo en 1960, atraído por servir a los demás y por la emoción de una profesión en la que, como él asegura, no hay dos días iguales. Hace diez años se jubiló, pero solo por 5 meses ya que se dio cuenta de que no era la vida que quería y pidió volver.
En esta entrevista para la CBS, ante la pregunta del entrevistador “¿qué te hace un buen oficial de policía, incluso con 91 años?” el veterano responde que “la placa y la pistola no te hacen un oficial de policía. Debes tener el respeto de la gente”.
Sus compañeros destacan la actividad y dedicación de este héroe de la ciudad que siempre está dispuesto para acudir a cualquier rescate. Incluso ha trabajado en numerosos festivales anuales y actividades voluntarias asociadas a la vigilancia y a la atención al vecindario.
Sin embargo, aunque sienta verdadera pasión por su trabajo, también le gusta disfrutar de su vida personal y sus aficiones, como asistir a los servicios de la iglesia. Buckshot es otro ejemplo más de que la edad solo es un número y que la vida es una cuestión de actitud.
