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Una "lengua eléctrica" podría ayudar a predecir el sabor de los medicamentos
Permitirá que los pacientes cumplan con sus tratamientos de forma más efectiva
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Una "lengua eléctrica" podría ser capaz de predecir el amargor de los medicamentos y ayudar así a que estos sean de más cómodo consumo para los pacientes. En este sentido, un grupo de investigadores de la Escuela de Negocios Global para la Salud (GBSH) de la University College London (UCL) y la Facultad de Farmacia de la UCL están utilizando datos sacados de esta "lengua electrónica" para la creación de un modelo de inteligencia artificial con este objetivo.
"El gusto es clave para garantizar que las personas tomen sus medicamentos con regularidad y es una parte importante del desarrollo de fármacos", explican el equipo de investigadores, dirigido por el doctor Hend Abdelhakim, en una nota recogida por la UCL.
En ella indican que el gusto es "el mayor obstáculo" para que los pacientes cumplan con sus tratamientos, no solo los niños, también los adultos.
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Esta lengua electrónica consiste en un dispositivo elaborado con sensores que responden al gusto, el cual les ha permitido asignar puntuaciones de amargor a los medicamentos y así determinar el grado de desagrado que puede provocar en los pacientes, de forma mucho más "rápida y efectiva" a como lo haría un ensayo en humanos.
Lo hace descomponiendo el medicamento en varios descriptores moleculares, los cuales determinarán el sabor. "Ejecutamos un algoritmo de aprendizaje automático para ver básicamente cuál es la estructura química, cuál es la estructura molecular, cuáles son los otros parámetros físicos químicos que lo hacen amargo y tratamos de ver si existe una relación", explicaba el doctor Abdelhakim al Telegraph.
Por muy beneficioso que sea un medicamento, "si el paciente no lo toma, no funcionará", señalaba. De ahí la importancia de mejorar su sabor, sobre todo cuando se trata de medicamentos que se tienen que tomar durante un largo periodo de tiempo o comenzando desde muy jóvenes.
Tienen previsto que este modelo, que todavía se está desarrollando, sea una herramienta de acceso abierto para que todos puedan beneficiarse de su uso.