Un matrimonio de 98 y 97 años celebra de nuevo su boda para poder tener fotos del momento

Royce y Frankie King son la viva imagen de que el amor puede ser eterno. Aunque parezca extraño, a sus 98 y 97 años se han vuelto a casar tras 77 años de matrimonio, pero esta vez con una ceremonia completa, como no pudieron hacer en su momento.

Su historia se remonta a 1944, cuando Frankie consiguió un permiso de unos cuantos días antes de regresar al frente en la Segunda Guerra Mundial. Temeroso de que no pudiera regresar del conflicto bélico, la pareja decidió casarse sin planificar nada, por no tener, no tenían ni traje ni vestido ni fotógrafo.

Frankie regreso, y durante 77 años, vivieron como cualquier matrimonio normal. La idea de revivir su boda surgió en su 77 aniversario, cuando ambos fueron preguntados por si tenían alguna fotografía del momento. No había ninguna, por lo que la residencia de mayores donde viven actualmente, St. Croix Hospice (Estados Unidos), decidió realizar de nuevo la ceremonia que la pareja nunca tuvo. 

Más de siete décadas después

Royce tiene 98 años y fue teniente de las fuerzas Aéreas en 1972, y Frankie tiene 97 años y fue ama de casa y auxiliar dental. Ambos tienen una hija, quien fue cómplice de la celebración, ayudando a su madre a vestirse de blanco, por fin, mientras que su padre se vistió con su uniforme de las Fuerzas Aéreas. 

"Nuestro musicoterapeuta tocó clásicos de la década de 1940 mientras Frankie caminaba por el 'pasillo' con su hija hacia su único amor verdadero", escribían desde el St. Croix Hospice, quienes publicaron esta maravillosa historia en sus redes sociales, haciendose viral en Facebook y en Instagram. La residencia de St. Croix Hospice "trata de honrar toda la vida de un paciente e incluso de contribuir a su historia", añadían en el mensaje. 

“Escoltaron a mi padre fuera, lo sentaron y le pusieron un pañuelo sobre los ojos", explicó la hija de ambos describiendo el momento, según informa El Comercio. "Bajamos a mi madre por las escaleras traseras y cruzamos el patio hasta que se paró frente a mi padre para quitarle el pañuelo. Le dije ‘¿Estás listo para ver a tu novia?’”, tras lo que ambos sonrieron de forma tierna, según relató ella misma.

Por fin, Royce y Frankie tuvieron la ceremonia que tanto desearon, y un álbum de bodas con todas las fotos que inmortalizaron el momento. "Tener a Frankie a mi lado" ha sido lo mejor de todo ese tiempo para Royce.