El protocolo articulado por la Xunta de Galicia para la jornada electoral del 12 de julio recoge un refuerzo de las medidas de seguridad sanitaria en los colegios, que incluyen dar prioridad en el acceso a los mayores de 65 años, guardar la distancia de seguridad de 2 metros, el uso obligatorio de mascarillas y colocar "en lugares de fácil acceso" las cabinas de votación "tratando de evitar" las cortinas en las mismas para no tener que manipular este elemento.
Así lo han explicado el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, durante la presentación de un protocolo en el que han colaborado ambos departamentos, y que incorpora las propuestas del comité clínico que asesora al Ejecutivo gallego en el marco de la crisis sanitaria del coronavirus.
Las medidas de seguridad sanitaria que incorpora –y algunas peticiones sobre el procedimiento (como la simplificación del voto por correo) que tendrá que analizar la Junta Electoral, ya que no es competencia de la Administración autonómica– han sido puestas en conocimiento de los municipios, como "colaboradores y ejecutores" imprescindibles en el proceso. Posteriormente, el protocolo será aprobado en el Consello de la Xunta de este viernes y remitido a la junta electoral.
Tanto Rueda como Almuiña han incidido en que la situación epidemiológica de Galicia va por buen camino, pero, en palabras del vicepresidente, la Xunta es consciente de que el 12J "no será una jornada electoral más", por lo que es preciso dotarse de todas las medidas precisas para garantizar la seguridad sanitaria de votantes y miembros de las mesas electorales.
Así, según recoge el protocolo, los electores que acudan a votar deberán llevar de forma obligatoria mascarilla: bien la que lleven de su domicilio o una de las que estarán a su disposición en el local electoral. Se la tendrán que apartar en el momento de la identificación para emitir el voto.
También deberán higienizar as manos de forma obligatoria con el gel hidroalcohólico que habrá en los locales antes de hacer entrega de su sufragio.
Llevar el voto preparado
La Xunta recomienda que, en la medida de lo posible, se lleve el voto preparado de casa para evitar al máximo los contactos. Si hubiera que ir a una cabina de votación, Almuiña ha explicado que estarán en zonas accesibles y que se "tratará de evitar" las cortinas que suele haber en las mismas, con el fin de que no sea preciso manipular este elemento.
Las pautas para los miembros de las mesas también se basan "en la higiene" y en el uso de material de protección. En concreto, se les facilitarán cuatro mascarillas a cada uno para cumplir "con la necesaria renovación cada cuatro horas", y también dispondrán de una pantalla facial.
Asimismo, contarán con productos de higiene para que puedan usarlos a lo largo de la jornada y habrá un dispositivo, como una bandeja, para que el votante deposite su DNI sin necesidad de que sea manipulado por los miembros de la mesa.
Distancia de seguridad y prioridad a mayores
En el plano organizativo, la directriz del protocolo es que se intente mantener la distancia de seguridad de dos metros. De no ser posible, y al llevar equipos de protección, se determina que se deberá guardar en todo caso "un metro como distancia mínima".
Además, se organizará la entrada de los votantes, priorizando a los mayores de 65 años y personas con discapacidad.
Con el mismo objetivo, se establecerán flujos y circulación, y circuitos separados de entrada y salida cuando sea posible; y se instalarán carteles informativos con las recomendaciones sanitarias, así como las indicaciones correspondientes en el suelo sobre distancias y sentido de la circulación.
Los locales deberán ser correctamente ventilados, antes y durante la jornada electoral, además de que se intensificarán las actuaciones de limpieza y desinfección previamente y en el propio día. De hecho, los ayuntamientos podrán solicitar que se desinfecte antes de la jornada.
Y durante a misma, los locales deberán limpiarse por lo menos tres o cuatro veces, cuando lo autoricen los presidentes de las mesas, e incidiendo en las superficies más expuestas. Rueda ha remarcado estas acciones de limpieza serán "permanentes" a lo largo de todo el domingo electoral.
Como novedad, al margen de los representantes de la Administración que velan por que cada proceso discurra con normalidad, este 12J la Xunta prevé contratar a un equipo de "unos 130 o 140" coordinadores con conocimiento en prevención de riesgos que se encargarán de supervisar los locales electorales para que cumplan las medidas que recoge el protocolo.
Visitarán los centros previamente y también el propio día de la jornada electoral, mediante rondas, para velar por que se cumplen las pautas fijadas.
Coste añadido que asumirá la Xunta
Rueda ha ratificado que todas estas medidas de seguridad –por ejemplo, habrá mascarillas en los colegios por si alguien no la llevase al desplazarse hasta el colegio electoral– tendrán un coste añadido, aunque no ha precisado a cuánto ascenderá, pero sí ha concretado que será "asumido" por la Xunta como Administración organizadora de los comicios.
De hecho, ha indicado que el coste de las mascarillas no se podrá determinar hasta ver cuántas serán necesarias la propia jornada de votación y ha precisado que la situación sanitaria también exigiría un incremento si los comicios se celebrasen en septiembre y no en julio.
"Seremos los que ponemos las pautas, nos ocuparemos de su implantación y también de la solución de sus costes", ha incidido el vicepresidente, convencido de que Galicia "camina a paso firme hacia la normalidad". "La premisa fundamental es que se vote con total tranquilidad el 12 de julio", ha afirmado
Por su parte, Almuiña ha esgrimido que "todos los datos apuntan a que julio será un momento tranquilo" para votar "en condiciones adecuadas", pero ha añadido que el protocolo quiere ir "más allá" para que la jornada electoral se desarrolle con las garantías sanitarias máximas.
