Los mayores urgen al Imserso a avanzar en el nuevo modelo de cuidados

Avanzar en el nuevo modelo de cuidados, realizar un balance sobre el impacto del Plan de Choque de la Dependencia, aprobar la Estrategia contra la Soledad, seguir fortaleciendo al movimiento asociativo, hacer más en la lucha contra el edadismo, redactar un nuevo pliego para los viajes del Imserso 2025-2026...

Estos son algunos de los retos y deberes que ponen al Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) y al Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, de cara a este 2025, asociaciones de mayores y de familiares de residencias consultadas por 65YMÁS, así como desde el sindicato CCOO y desde organizaciones como HelpAge España. 

Desinstitucionalización

En concreto, Lázaro González, presidente de la Plataforma de Mayores y Pensionistas (@PlataformaPMP), la organización que representa a las principales organizaciones de personas de más de 65 años del país, opina que el Imserso y el Ministerio deberían seguir avanzando este 2025, junto a las comunidades autónomas –que tienen la competencia en servicios sociales–, en la aplicación del "nuevo modelo de cuidados de larga duración", que permita envejecer en los hogares a los mayores.

En ese sentido, aboga por que se fomente una teleasistencia avanzada –nuevas tecnologías– que sea universal y accesible para todos; por que se mejore la ayuda a domicilio, ya que las horas que se prestan actualmente para algunas dependencias son muy "escasas"; por crear más centros de día; y por realizar una asistencia sanitaria en el hogar –con un protagonismo de la enfermería–, acercando todos los servicios a las casas.

Balance del Plan de Choque de la Dependencia

Para Carlos Bravo, secretario de Políticas Públicas y Protección Social de CCOO (@CCOO), la institución debería realizar este año "el seguimiento de las estrategias iniciadas en los últimos años –en materia de Dependencia–, con la intención de actuar con propuestas de mejora de calidad y de cumplimiento de objetivos y, por otro lado, de completar los acuerdos y objetivos del Plan de Choque", véase, de los fondos extra que se destinaron durante varios años tras la pandemia, para mejorar el sistema de cuidados. 

De esta manera, Bravo exige que se realice un "seguimiento de los efectos" de dicho Plan para ver cómo ha incidido en la reducción de las listas de espera, así como para estudiar qué tipo de prestaciones que se están dando a los usuarios y cuál ha sido la "evolución del empleo y su calidad en los servicios sociales". 

Asimismo, reclama, "llegar a registrar y conocer de forma efectiva el copago por parte del usuario, de una forma consistente, tanto a nivel local como territorial, y la repercusión real, su porcentaje o ponderación, que tiene en la partida total del gasto en el Sistema de Dependencia".

Finalmente, cabe recordar que otro de los retos del Imserso en materia de Dependencia, no sólo de cara a 2025, sino para toda la legislatura, es que el Estado siga aumentado la financiación del sistema de cuidados hasta llegar al 50% de aportación. Se trata de era una promesa del acuerdo PSOE-SUMAR y un objetivo reclamado históricamente por sindicatos y patronales, así como por las propias comunidades.

Aplicar el nuevo modelo de residencias

Impulsar y velar por que se cumpla el nuevo modelo de residencias, conocido técnicamente como Acuerdo sobre criterios comunes de acreditación y calidad de los centros y servicios del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia, es otro de los deberes que las organizaciones consultadas ponen al Imserso.

 El documento, aprobado en 2022, pretendía humanizar la atención, apostar por la formación y mejorar las condiciones de los trabajadores, convirtiendo los centros sociosanitarios en lugares más hogareños que huyesen del concepto de macrorresidencia. 

En el acuerdo, que se concibió como un texto de mínimos, se planteaba la creación de unidades de convivencia de 15 personas en las residencias, que una mayoría de las habitaciones fuesen individuales –65%–, fijar un número de plazas máximo para los nuevos centros dependiendo de si se construían en zonas rurales o grandes urbes, fomentar la coordinación sociosanitaria, acabar con las sujeciones a mediados de 2025 o aumentar progresivamente las ratios de personal, entre otros muchos cambios.

De cara a este año, Bravo reclama al Imserso realizar "una auditoría para conocer la realidad de ejecución de los términos contenidos" en el documento. "Con estos datos podremos adelantar la repercusión de este convenio y las posibles necesidades de recomendaciones de mejoras", detalla.

Por su parte, el portavoz de la Plataforma Estatal de Familiares de Residencias (@La_Plataforma_1), Miguel Vázquez, reclama que la administración central publicite el Acuerdo para que no caiga en el olvido y recuerda que era un texto de mínimos que puede ser mejorado por las CCAA, pero no empeorado. Por ello, reclama "que condicionen el nivel acordado de financiación a mecanismos efectivos de cumplimiento e implementación del mismo, incluyendo un estudio de necesidades de plazas residenciales a nivel de cada comunidad autónoma, que tenga en cuenta la incidencia que la estrategia de desinstitucionalización y el fomento de la ayuda a domicilio va a tener en esas necesidades, potenciando el cubrimiento de esas plazas por la iniciativa pública y primando a las comunidades autónomas que elaboren planes para cubrir esas necesidades de plazas".

También emplaza al Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 a mejorar ciertos aspectos del documento, abordando, "de forma rigurosa, el problema del personal necesario". En concreto, explica, en el Acuerdo de 2022 se fijaba el objetivo de lograr unas ratios de personal de atención directa de 0,43 en 2030 en toda España, cuando, en un estudio realizado por Pladigmare, UGT y CCOO, en el que también ha participado la SEGG, se demuestra que sería necesario llegar a 1,32 para dar una correcta atención. 

En este sentido, cabe recordar que desde este Ministerio explicaron recientemente a 65YMÁS que existe un fondo dotado "con 200 millones de euros" para la aplicación del nuevo modelo de residencias. Además, aseguraron que desde el Ejecutivo trabajan para que el documento se cumpla, "actuando a través de la difusión del conocimiento mediante jornadas y formación relacionadas con los modelos de calidad en centros y servicios procedentes del entorno europeo, que puedan servirnos para implementarlos en nuestro ámbito". "Asimismo, se está impulsando desde la Secretaría de Estado de Derechos Sociales, la contratación de un servicio de Asistencia técnica para un estudio sobre la implantación del Acuerdo e identificación de buenas prácticas, con el objeto de analizar su implementación en las distintas CCAA, así como identificar y sistematizar buenas prácticas implementadas por parte de las CCAA, relacionadas con el desarrollo de temáticas que se abordan en el citado acuerdo en las diferentes tipologías de servicios del Sistema para la Autonomía y la Atención a la Dependencia (SAAD)", detallaron. "Los resultados de las evaluaciones serán transparentes y se rendirá cuentas a la ciudadanía y grupos de interés específicos", indicaron.

Viajes del Imserso

Por otra parte, recuerda Carlos Bravo de CCOO, de cara a este 2025, el Imserso debería también realizar una nueva licitación para la ejecución del Programa de Turismo Social, conocido como los 'viajes del Imserso', "adaptados a las nuevas realidades sociales". 

Según anticipó el organismo el año pasado, se procederá a realizar un nuevo pliego de condiciones de cara al concurso para la temporada 2025-2026 con cambios, aunque por ahora no han trascendido más detalles. 

"Es un programa importante que ha contribuido al bienestar de los mayores y a la economía. Todo lo que sea perfeccionarlo, mejorarlo o adaptarlo, nos parece bien", opina el presidente de la PMP, Lázaro González. 

Movimiento asociativo

El fortalecimiento del "movimiento asociativo de personas mayores" debe ser otro objetivo del Imserso de cara a 2025, en opinión del presidente de la PMP. Concretamente, indica, el apoyo financiero a estas organizaciones desde las instituciones es crucial para su funcionamiento y para el desarrollo de muchas de las actividades que realizan.  

Y recuerda que la participación de este colectivo y el asociacionismo "es uno de los pilares de la democracia". "Tienen que favorecerlo desde las instituciones", comenta. 

Igualmente, apostilla, el Imserso y el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 también deberían seguir trabajando este año en políticas que animen a los mayores a participar "en todos los ámbitos de la sociedad", incluida la política, el voluntariado, etc. 

Estrategia contra la Soledad

Otro de los retos del Imserso para este año es aprobar la prometida Estrategia contra la soledad, para afrontar a nivel nacional este problema, que, aunque no sólo afecta al colectivo mayor, sí les atañe especialmente.

Esta estrategia es una demanda histórica de las organizaciones de personas de más de 65 años, que, según prometieron desde el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 en 2024, podría presentarse este año que acaba de empezar y tendrá un enfoque tranversal –abordará el problema en todas las edades–. 

Lucha contra el edadismo

 

Hacer más por liderar la lucha contra el edadismo es otra de las tareas pendientes del Imserso para este año, añade González. Por ello, reclama a esta institución que lidere la lucha contra esta discriminación, para acabar con la falsa creencia de que el colectivo es una carga para el resto de la sociedad. 

"Somos ciudadanos de pleno derecho, como todos", recuerda. Y exige que las administraciones trabajen para promover una imagen más justa y positiva.

Asimismo, reclama incidir en la idea de que "los mayores no estamos contra los jóvenes". "Hay que acabar con el estereotipo de que somos una carga para ellos", comenta. "No queremos privilegios", comenta y hace un llamado a la "solidaridad intergeneracional". Además, reclama que se trabaje también desde el Ministerio de Igualdad en la no discriminación por edad, al igual que se hace con el género, el origen o la raza.

Trabajo transversal

Y es que, argumenta, otra reclamación de la Plataforma de Mayores y Pensionistas es que los temas relacionados con el colectivo sean tratados transversalmente entre todos los Ministerios –Derechos Sociales, Sanidad, Seguridad Social, Vivienda...–. "No todos somos dependientes", recuerda.

Por ello, llama a tener en cuenta el carácter heterogéneo de este colectivo, que tiene necesidades diferentes, pero una serie de derechos comunes como son el acceso a una atención sanitaria adecuada, tener cubiertas sus necesidades residenciales, disfrutar de una pensión suficiente y garantizada, la inclusión digital o la accesibilidad, entre otros. 

En un sentido similar se pronuncian desde HelpAge España (@HelpAgeEspana), que también reclaman que se cuente con el tercer sector: "Pediríamos que se incorpore a las políticas públicas que impulsa y desarrolla el Imserso, una visión más integral y holística para que los desafíos de la longevidad estén presentes en todas las políticas públicas y sobre todo que se engrasen mucho más los mecanismos de incidencia y cooperación del Imserso con las entidades del tercer sector. Queremos más participación y cooperación en todos los objetivos que nos unen, con el fin de mejorar las oportunidades de vida y la dignidad de las personas mayores".