"Cuando me retiré en 2018, no pensé que volvería a ejercer la profesión", cuenta a 65ymás Luis Aguado, médico anestesista jubilado que no ha dudado dos veces a la hora de ofrecerse voluntario como refuerzo ante la crisis sanitaria del coronavirus. "Estaba felizmente jubilado, disfrutando de mi tiempo libre tras hacer un viaje sabático a Nueva York, pero ante esta situación extraordinaria que ha surgido con el coronavirus, creo que todos debemos aportar nuestro granito de arena", sostiene este profesional sanitario con más de 40 años de experiencia.
Pese a que el Colegio oficial de Médicos de Madri (@Icomem_Oficial) acaba de abrir una bolsa de profesionales voluntarios para actuar ante el coronavirus ante la escasez de sanitarios, Luis asegura que "no tenía ni idea" y que contactó con ellos de manera "espontánea" para que le incluyesen en su lista de reserva para el Servicio Madrileño de Salud (SERMAS), uno de los más desbordados por la llegada de la pandemia ya que Madrid concentra más de la mitad de los casos. A esta bolsa se han presentado ya más de 700 voluntarios desde el pasado viernes 13 de marzo.
Una especialidad que requiere años de formación
"Se me ocurrió que por mi especialidad como anestesista de quirófano, puedo tener conocimientos de reanimación respiratoria que pueden ser básicos para los enfermos más graves del coronavirus que estén en las UCIs. Creo que puedo aportar un conocimiento que requiere años de formación y que en momentos como este no se tiene... Normalmente se necesitan 5 o 6 años, más especialidad para tenerlos, a lo que se suma el manejo de equipos muy sofisticados", aclara Luis quien recuerda que los expertos en Medicina Intensiva como él son escasos.
"Tengo entendido que lo que hace falta ahora son sobre todo médicos hospitalarios de intensivos, medicina interna y urgencias. Pero veremos cómo ser organiza, ya que es difícil de gestionar", opina, a la espera de que le llamen para explicarle dónde podría ir destinado a ayudar. "Pienso que todo dependerá de cuándo se alcance el pico más alto de la epidemia, en el que no estamos todavía, ni mucho menos".
"Nunca viví nada igual, salvo la crisis del colza"
Pese a una amplia carrera que comenzó en el Hospital Clínico San Carlos en Madrid, siguió en Tenerife, Pamplona y el Hospital del Mar del Barcelona donde se jubiló, Luis Aguado asegura que "nunca vivió nada igual en su vida. Por lo que veo en Italia, esto esto parece una situación de guerra...", comenta, mientras trae a la memoria un cementerio en Poblenou que alberga un monumento a los caídos de la fiebre amarilla de 1821. Varias lápidas reflejan palabras de agradecimiento a los médicos "heroes durante la crisis de la fiebre amarilla", que solo en Barcelona se cobro la vida de 6.244 personas.
En su propia experiencia, tan solo ha sucedido una crisis sanitaria "parecida", la del síndrome tóxico (Colza) que vivió cuando era residente. "En la fase segunda no se sabía de dónde provenía la infección, se ingresaba a familias enteras y se trataba con antibióticos, hasta que se supone que el origen de la epidemia era aceite contaminado", –relata–. "Pero entonces los hospitales no estaban tan desbordados", reconoce. "La situación de ahora es mucho más preocupante".
"Si me llaman sería una mala señal"
"Yo espero que no me me llamen pronto, porque si lo hacen sería una mala señal, porque significaría que las cosas van a peor...", considera Luis quien reconoce que desde inicios de marzo lleva percibiendo la situación como preocupante. "Tengo un grupo de compañeros de carrera médicos, con el que quedamos de vez en cuando y desde el 8 de marzo, no nos vemos por prevención", aclara.
Según cuenta, muchos de ellos, todavía en ejercicio, están viviendo esta situación con mucho estrés. "Están desbordados. Y es que es muy difícil manejarse en una situación de incertidumbre como esta. Se cometen errores, pero porque no se ha hecho nunca", considera. "Esa situación excepcional es lo que me animó a ofrecerme voluntario. Tengo miedo, como todo el mundo, pero me puede la voluntad de ayudar. Además, así salgo un poco del aislamiento", comenta entre risas y considera que él, por el momento, no es grupo de riesgo porque no tiene ninguna patología. "Incluso a veces lo hecho de menos", señala.
La Bolsa de Voluntarios del Colegio de Médicos
La iniciativa del Colegio de Médicos de Madrid se puso en marcha hace unos días ante la "emergencia sanitaria" originada a por la pandemia y por las necesidades específicas de la región. La Consejería de Sanidad madrileña ha pedido más de 1.000 médicos de familia, además de médicos hospitalarios de intensivos, medicina interna y urgencias, un tercer grupo de médicos para asistir los hoteles medicalizados y un cuarto grupo para SUMMA 112 (@SUMMA112madrid).
"Es conocido la escasez de médicos que hay actualmente y evidentemente no vamos a poder sacar médicos de debajo de las piedras, lo que vamos a hacer es intentar readaptar médicos fundamentalmente que provienen del ámbito no asistencial a funciones asistenciales", ha precisado el presidente del Icomem, Miguel Ángel Chillón. Entre ellos se incluyen médicos que se hayan jubilado recientemente como Luis, "en disposición de prestar asistencia", mientras que los más mayores "podrían colaborar sin exponerse a riesgo asesorando o haciendo seguimiento por teléfono, con la opción de seguir compatibilizándolo con su pensión", aclaran desde el Colegio.
Otras perfiles requeridos
El Colegio de Médicos considera además que los profesionales podrían proceder del ámbito científico, investigador y docente o de industrias relacionadas con la medicina y la farmacia. Los profesionales tienen que estar colegiados y "todos van a ser contratados" por el SERMAS, ha avanzado Chillón, quien ha agregado que el Colegio les va a facilitar la colegiación, y que está estudiando la posibilidad de hacerlo de forma gratuita, sin cobrar el primer recibo hasta el mes de octubre.
Asimismo, ha anunciado que el Colegio de Médicos clasificará también en un grupo aparte a los estudiantes de los últimos años de Medicina, porque sale en el BOE, y que ya están en contacto con el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina. También ha avanzado que, como grupo de apoyo, el Colegio de Médicos va a clasificar a médicos psiquiatras y "probablemente psicólogos", para dar apoyo técnico psicológico y psiquiátrico a los sanitarios que están trabajando si tienen esa necesidad.