Esta es la mejor hora para comer, según la ciencia

A lo largo y ancho del mundo, los hábitos alimenticios cambian enormemente. Sin ir más lejos, en Francia, comen en torno a las 12 y cenan hacia las 19, mucho antes del momento en el que lo solemos hacer nosotros. Para resolver el interrogante sobre cuál es la mejor hora para llevar a cabo cada una de las comidas del día, la ciencia se ha puesto manos a la obra y ha llegado a varias conclusiones. Lo primero que recomienda es la regularidad: es mejor mantener unos horarios similares a lo largo del tiempo que ir variandolos a cada día que pasa.

Desayuno

La primera comida del día ha recibido siempre el apelativo de la 'más importante del día'. En ella, nuestro cuerpo reúne una buena cantidad de nutrientes que le permitirán tener la energía necesaria a lo largo de la mañana. Según un estudio de la academia estadounidense de nutricionistas y dietistas Constance Brown-Riggs lo más conveniente es retrasarlo una hora desde el momento en el que te levantas. Sin embargo, si sueles despertarte pasadas las 9:30 no hay que tomarse muy en serio la norma, ya que, como arguye un estudio de la Universidad de Tel Aviv, metabolizamos mucho más rápido antes de ese momento. 

Comida

Según un trabajo conjunto entre la Universidad de Murcia y Harvard, la comida debe tener lugar entre las 12:30 y las 13:30, justo a mediodía. Esto se debe a que, por la tarde, los niveles de insulina descienden y nuestro organismo no digiere con tanta facilidad los azúcares. El mismo estudio alerta, además, de lo desaconsejable que es comer a deshoras, una práctica que confunde a nuestro reloj biológico y tiene mucho que ver con la aparición de la obesidad. 

Cena

En cuanto a la última comida del día, varios investigadores coinciden en que su momento ideal varía bastante de persona a persona. Se establece en función de la hora a la que nos vamos a dormir, algo que cambia de persona a persona. Lo único que hay que tener en cuenta es que es más sano cenar por lo menos tres horas antes de que nos vayamos a dormir y que, además, no es recomendable ingerir gran cantidad de comida. 

Habida cuenta de todo ello, la catedrática de Fisiología de la Universidad de Murcia y una de las autoras involucradas en el trabajo mencionado, Marta Garaulet concluye que el mejor modelo posible para los españoles se encuentra cruzando el Mediterráneo: "Deberíamos adelantar nuestro horario una hora, tal y como hacen los italianos", asegura.