Miriam Blasco (1963) fue la primera deportista española en conseguir una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992. Lo hizo en judo, deporte que empezó a practicar con 8 años: "Mi padre era profesor de Educación Física y madre tenía una tienda de deportes en Valladolid. Somos una familia de 8 hermanos, entonces íbamos dos a judo, dos a gimnasia… A mí me tocó judo por casualidad y me enamoré desde el principio", nos cuenta. 65YMÁS.
A pesar de ser una apasionada de este deporte, Blasco nunca se planteó participar en unos Juegos Olímpicos: "Cuando me vine a vivir a Alicante, el entrenador que yo tenía había ido a los Juegos de Seúl 1988, y era muy buen competidor. Cuando volvió me dijo ‘Miriam, ¿por qué no entrenamos para los Juegos Olímpicos de Barcelona? He visto los juegos en Seúl y creo que puedes quedar campeona olímpica, ¿quieres intentarlo?’", recuerda.
En el momento en que a la yudoca le hacen esta pregunta, acababan de anunciar España iba a ser la anfitriona de los próximos Juegos: "Y dije ¿por qué no? Había visto los juegos en la televisión, pero esto fue algo así como, ¿quieres probar? Pues vale, probamos", comenta.
Si Miriam fue la primera deportista en conseguir un oro olímpico en su categoría, es porque hasta Barcelona la categoría de judo no fue oficial: "En Seúl fue la primera vez que las chicas en judo podían participar en la categoría de exhibición, pero la primera vez que fue oficial, fue en 1992", explica.
A esta competición Blasco llegó en la mejor de las condiciones: "Había quedado el año anterior campeona del Mundo, de alguna forma, era la favortia y se decía que una de las medallas fijas en los Juegos iba a ser la mía. Tenía presión, pero por suerte me manejo bastante bien con ella", asegura.
Y sin que la presión pudiera con ella, consiguió su primer oro: "Me enteré de que era la primera mujer después de haberlo ganado, de lo cual me alegro porque sino quizá hubiera sentido la presión de otra manera. Yo abrí la pregunta del Trivial por así decirlo, pero en Barcelona’92 hubo muchas mujeres que también consiguieron medalla", bromea.
De deportista a entrenadora
Con su oro conseguido, Blasco volvió a los Juegos de Atlanta 1996, pero esta vez como entrenadora: "Un mes antes de los Juegos de Barcelona, mi entrenador Sergio falleció en un accidente de tráfico. De alguna forma me vi en la obligación de ser entrenadora, aunque quizá no era lo que me correspondía", nos explica.
"Si Sergio hubiera estado vivo, seguramente hubiera estudiado Filología. Pero bueno, ser entrenadora era una forma de ayudar a la gente que estaba en el club, y me gustó esta faceta", asegura.
A pesar de este giro, intentó clasificarse en la categoría superior de peso para esta competición, y aunque no lo consiguió, "dos alumnas mías, Yolanda e Isabel quedaron terceras".
Motivada por ayudar a los demás, y con "la obligación de hacer algo" tras la muerte de su entrenador, Miriam y su exmarido fundan el club de judo que lleva su nombre, que actualmente él gestiona y ella colabora: "Mi idea nunca fue montar un club, pero después de ser campeona olímpica, sí que te planteas cómo puedes influenciar en tu deporte y cómo puedes ayudar a los niños y los jóvenes, y como los puedes motivar", confiesa.
Además de su carrera deportiva, Blasco estuvo 16 años en la política, y fue elegida senadora del Partido Popular por Alicante en las elecciones general del año 2000, 2004 y 2008. Y fue diputada de 2011 a 2015.
¿Por qué este cambio? Pues precisamente por lo que ha comentado anteriormente: "Al tener un club era difícil todo el tema de las ayudas, y como deportista también viví muy de cerca lo complicado que resulta compaginar el deporte y la formación. Los clubes no teníamos ayudas de sponsors, no se desgravaba, no había desgravación fiscal… Entonces en una comida empecé a plantear preguntas y me propusieron ser senadora. Pensé, ¿qué puedo hacer yo ahí? Una de mis hermanas, que es profesora de Derecho me dijo que sí que se podía hacer cosas, y me aventuré por eso, para intentar ayudar y ser portavoz de los deportistas", recuerda.
Y así lo hizo: "Cree una comisión para ver cómo se podía compaginar el deporte y la formación, conseguí sacar adelante el programa PROAD, que aún sigue vigente, la Seguridad Social para los deportistas, los derechos de imagen del fútbol, dar visibilidad a la mujer en el deporte, en los medios de comunicación, mecenazgo para mujer y deporte, pero también para los clubes pequeños…", enumera.
Tras conseguir mejorar la situación profesional de los deportistas, Blasco continúa vinculada al deporte de su vida, y se muestra optimista con la participación de España en estos Juegos Olímpicos de París 2024: "Llevamos desde el año 2000 sin medalla, y yo creo que este año se tiene que romper esta racha porque tenemos a nueve competidores y estoy segura de que alguna medalla nos llevaremos", concluye.
Sobre el autor:
Laura Moro
Laura Moro es graduada en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III de Madrid, y está especializada en temas de salud y género. Su trayectoria profesional comenzó en Onda Cero Talavera.