Agatha Christie, la reina del crimen, nació un día como hoy en 1890 en Tourquay (Reino Unido). Sus novelas policiacas la han convertido en un referente mundial, en una de las escritoras más importantes de la historia y la novelista que más obras ha vendido de todos los tiempos. A pesar de que muchos fans conozcan sus historias a la perfección, pocos saben que, en la vida real, la dama del misterio conmocionó al mundo con su extraña desaparición, digna del argumento de uno de sus libros.
El 4 de diciembre de 1926, una noticia ocupó las portadas de todos periódicos: Agatha Christie había desaparecido. Tras dejar una nota a su secretaria diciéndole que "se iba a dar una vuelta", su coche apareció abandonado con un choque frontal en una cantera del condado de Surrey, en Inglaterra. Dentro del vehículo, se encontró un abrigo de piel, un carnet de conducir y una maleta pequeña, pero ni rastro de la escritora. Por aquel entonces, ya era muy famosa, por lo que el suceso volcó a todo el país y casi mil policías y 15.000 voluntarios civiles participaron en las tareas de búsqueda para encontrar el paradero de Agatha Christie.
Incluso, se llegó a acudir a una médium para dar con ella. Como en ese momento estaba casada con su primer marido, Archibald Christie, y era madre de una niña, nadie pensó que podría haberse fugado voluntariamente. La ficción había pasado a ser una realidad y se convirtió en un misterio real, que tenía como protagonista a la propia escritora. Se barajaron numerosas hipótesis, ¿había sido asesinada a manos de su esposo o de un asesino en serie? o, quizá, ¿se trataba de una campaña para promocionar su última novela? Sin embargo, la historia no pudo tener otro final que ungiro de guion: Christie apareció a los once días sin un rasguño en la ciudad balneario de Harrogate, Yorkshire, donde estuvo hospedada en un hotel bajo el nombre de Teresa Neele, el apellido de la amante de su marido.
Agatha Christie jamás dio explicaciones de lo ocurrido. La prensa se le echó encima, criticando duramente su comportamiento y asegurando que parecía que realmente se trataba de una estrategia promocional. En cambio, su familia defendió que la escritora británica sufría amnesia. Una de las teorías apuntaba que la muerte de su madre a principios de año y la infidelidad de su marido habían agravado su depresión, provocando una crisis nerviosa. Sea como fuere, lo cierto es que Christie nunca reveló qué sucedió durante esos once días que estuvo desaparecida, llevándose el secreto a la tumba.
131 años de la reina del misterio
Agatha Mary Clarissa Miller, su nombre real, dijo que tuvo una infancia feliz, pero el hecho de que sus padres decidieran educarla en casa, hizo que se sintiera muy sola, lo que le empujó a desarrollar su creatividad creando personajes e historias desde muy pequeña.
Mientras ejercía como enfermera durante la Primera Guerra Mundial, escribió El misterioso caso de Styles (1920), donde apareció por primera vez el famoso detective Hércules Poirot. En su autobriografía cuenta que para crearlo se inspiró en los refugiados belgas afincados en su ciudad natal después de la contienda.
Más tarde, el mismo año de su desaparición, publicó su primer gran éxito, El asesinato de Roger Ackroyd, con más de 5.000 copias vendidas y, desde entonces, su popularidad fue en aumento. Su obra más vendida surgió durante Segunda Guerra Mundial, Diez negritos (1939), que se convirtió en la novela de misterio más leída de toda la historia. En una ocasión, Christie dijo que "los mejores crímenes para mis novelas se me han ocurrido fregando platos. Fregar los platos convierte a cualquiera en un maníaco homicida de categoría".
A pesar del sufrimiento causado por la infidelidad de su marido, Agatha Christie contrajo un segundo matrimonio con el arqueólogo Max Mallowan, del cual estaba muy enamorada y que permaneció a su lado hasta el momento de su muerte.
En total, escribió 74 novelas, 154 relatos cortos, 20 obras de teatro y 2 autobiografías y, curiosamente, a pesar del terrible final que suelen tener sus personajes, Christie falleció por causas naturales el 12 de enero de 1976, a los 85 años, en su residencia Winterbrook House de Wallingford, en el condado de Oxfordshire (Reino Unido).
Sobre el autor:
Marta Vicente
Marta Vicente Carmona es Graduada en Periodismo por la Universidad Rey Juan Carlos y Máster de Marketing Digital y en Edición y Postproducción Digital. Es redactora especializada en temas de sociedad y salud y tiene experiencia como Community Manager.