Javier Marcos, propietario de una tienda de cortinas del barrio barcelonés de Fort Pienc, ha sido multado con 7.501 euros, por querer contratar solo a una "mujer con edad mínima de 40 años", para un puesto de dependienta.
Marcos publicó el anuncio en una de las plataformas de empleo porque en su tienda actualmente trabajan cuatro hombres y una mujer de 68 años, que está a punto de jubilarse. Además, el propietario cree que como sus clientes son sobre todo mujeres mayores, lo mejor sería contratar a una mujer.
Doble discriminación: por sexo y edad
Según Inspección de Trabajo, el anuncio es discriminatorio por razón de sexo y edad, aunque Marcos se defiende alegando que solo quería ayudar a este colectivo: "Tienes una oportunidad en la vida de ayudar y vemos claro qué pasa. Son 7.501 euros y no me queda otro remedio que seguir para adelante, pedir un crédito en un banco y pagar", comenta el propietario a La Sexta.
La resolución de Inspección de Trabajo cree que no se debe especificar el sexo en una oferta de trabajo cuando "por la naturaleza de las actividades profesionales concretas o por el contexto en que se lleven a cabo esta característica constituya un requisito profesional esencial y determinante, siempre que el objetivo sea legítimo y el requisito proporcionado".
"Pensaba que tendría un alud de candidatas y lo que he tenido es una multa", lamenta el empresario al Diario Ara, que ha abierto el debate sobre si se deberían o no hacer este tipo de anuncios.
Sobre el autor:
Laura Moro
Laura Moro es graduada en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III de Madrid, y está especializada en temas de salud y género. Su trayectoria profesional comenzó en Onda Cero Talavera.