El consumo de alcohol tiene consecuencias negativas para nuestro organismo, y a pesar de somos conscientes de ello, la mayoría de la gente bebe. Según datos del ministerio de Sanidad publicado en el Informe 2021: Alcohol, tabaco y drogas ilegales en España, el 77,2% de los adultos españoles mayores de 15 años había consumido alcohol en los 12 meses anteriores, y el 63% en los treinta días anteriores.
Estos datos hacen que sea importante establecer una cantidad de alcohol útil y realista al mismo tiempo. Y esto es precisamente lo que han hecho los hepatólogos en el Congreso internacional del Hígado que se ha celebrado en Londres. El mensaje de los expertos es claro: si queremos proteger nuestra salud hepática, deberíamos estar tres días seguidos sin beber nada de alcohol, y el resto de días, su consumo debe de ser moderado y acompañado de una buena alimentación.
Así lo manifestó Aleksander Krag, vicesecretario general de EASL (Asociación Europea para el Estudio del Hígado), que además advirtió que las personas tendrían que intentar "no consumir más de cinco unidades de alcohol de una vez, ni más de diez a la semana" (es decir, no más de diez vinos a la semana, diez cañas, o cinco combinados tipo gin tonic).
Krag matizó que estas cantidades no se deben beber pensando que es sano o seguro, sino simplemente porque es lo que nos gusta: “No debes beber una copa de vino pensando que es sano, sino porque te gusta”. El experto recordó que aunque estas cantidades sean más tolerables para el hígado, cualquier cantidad de alcohol aumenta el riesgo de padecer cáncer.
La segunda causa de trabajos perdidos en Europa
El consejo de Krag no ha gustado a toda la comunidad científica, y José Luis Calleja, presidente de la Asociación Europea para el Estudio del Hígado, ha asegurado que "lo que hay que hacer básicamente es consumir la cantidad más moderada que uno pueda de alcohol sabiendo que es extremadamente adictivo y tóxico para el hígado en cualquier circunstancia".
Y es que las enfermedades del hígado suelen afectar a las personas jóvenes y de mediana edad que pertenecen sobre todo a grupos sociales vulnerables: "Contrasta con las enfermedades causadas por el tabaco y la obesidad, como el cáncer de pulmón y la diabetes tipo 2, que causan fallecimientos típicamente entre sexagenarios y septuagenarios", explica el informe conjunto de la Asociación Europea de Estudio del Hígado (EASL, por sus siglas en inglés) y la revista The Lancet.
Los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) muestran que las enfermedades del hígado son la segunda causa de años de trabajo perdidos en Europa, por detrás de las coronarias.
“El 90% de las enfermedades hepáticas son prevenibles, y lo que incrementa el riesgo son dos cosas: primero, el alcohol y, segundo, los riesgos metabólicos asociados con el sobrepeso y la diabetes tipo 2″, asegura Vanessa Hebditch, portavoz de la BLT durante el congreso. “Sabemos que si localizamos la enfermedad pronto podemos evitar que el daño progrese y en algunos casos incluso revertirlo”.
Sobre el autor:
Laura Moro
Laura Moro es graduada en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III de Madrid, y está especializada en temas de salud y género. Su trayectoria profesional comenzó en Onda Cero Talavera.