A qué oposiciones puedo presentarme pasados los 50 años y cuáles tienen límite de edad

Si tienes más de 50 años y estás pensando en prepararte unas oposiciones, aún estás a tiempo. En el blog opositatest te explican las ventajas de esta opción y cuáles son los detalles imprescindibles para elegir el tipo de oposición. Aunque a priori parezca un hecho atípico, lo cierto es que cada vez etsá más normalizado y vale la pena.

Los beneficios de conseguir esta plaza son la estabilidad laboral, unas retribuciones económicas atractivas, vacaciones, días de asuntos propios y otras licencias y permisos. Todo esot al mismo tiempo en el que desarrollas una vocación profesional.

Además, el hecho de tener más de 50 años otorga al opositor ciertas ventajas, como la claridad y madurez. Por otro lado, hay un mayor bajage intelectual después de décadas de experiencia que suman en la preparación. Otro aspecto a tener en cuenta es la capacidad de concentración, que aunque al principio pueda resultar compleja, es probable poder concentrarse más que en la época estudiantil.

Para poder optar a tan ansiada plaza, solo es necesario tener motivación, voluntad para alcanzar el objetivo, una gran capacidad de organización. Además, también es importante contar con ayuda profesional en este proceso tan competitivo.

En general, en la mayoría de oposiciones no hay un límite de edad, salvo la de jubilación forzosa. Únicamente para algunas plazas, como las de ciertas fuerzas de seguridad, cuerpos de bomberos y similares, se establecen límites más restrictivos. Algunas de las más interesantes para mayores de 50 años son las de Correos, auxiliar administrativo del Estado o las oposiciones sanitarias.

¿Como elegir que oposición me preparo?

Para adentrarse en este camino, es necesario tener varios factores en cuenta. Primeramente, es muy valorable la vocación profesional del puesto, si nos gusta o si tenemos conocimientos y experiencia sobre el mismo. La dificultad de la oposición determinan los años necesarios para prepararla, por lo que es importante de cara a la decisión. Además, sería conveniente conocer la carga de trabajo, así como el horario, para que no interfiera en nuestra conciliación familiar.