El sector de las agencias de cuidados –las principales son: Cuideo, Cuidum, Depencare, Senniors, Aiudo, Vital Servit, Qida y Wayalia– no ha parado de crecer en la última década.
Sin embargo, según critican varios expertos consultados por 65YMÁS, como la presidenta de la Fundación Pilares, Pilar Rodríguez, el especialista en economía silver, Juan Carlos Alcaide o el CEO de la empresa Supercuidadores, Aurelio López-Barajas, este segmento económico en plena expansión tiene aún una tarea pendiente para garantizar un servicio de calidad: deben profesionalizarse y pedir a quienes trabajen con ellos algún tipo de titulación específica para realizar funciones como higiene, soporte emocional, supervisión de las actividades diarias, control de medicación, preparación de comidas, paseos y recados o limpieza.
Y es que estas agencias no exigen siempre formación a las personas que trabajan con ellos. La razón: por ley no tienen la obligación, puesto que sólo hacen de intermediarias, ayudando con la preselección, pero, al final, es la familia la que contrata directamente al cuidador como empleado del hogar.
Por ello, los expertos consultados reclaman al sector que se profesionalice y que se pida algún tipo de certificado de profesionalidad con el objetivo de garantizar un servicio de calidad.
Varias de las agencias de cuidados más importantes también son conscientes de esta necesidad, según aseguran a 65YMÁS.
65YMÁS se ha puesto en contacto con Cuideo, Cuidum, Depencare, Senniors, Aiudo, Vital Servit, Qida y Wayalia para conocer si comparten las demandas de los expertos consultados. Sólo Cuideo, Cuidum, Qida, Aiudo y Depencare han respondido a las preguntas de este diario.
El CEO de Qida (@QidaCare), Oriol Fuertes, ha comentado a 65YMÁS que comparte con los expertos la importancia de tener formación para cuidar, sobre todo, cuando son servicios con un mayor nivel de complejidad.
En concreto, desde su empresa piden un mínimo de 200 horas de formación a las trabajadoras contratadas por los usuarios que vayan a cuidar por horas a las que les encargan tareas de mayor especialización como movilización, control de la medicación, etc.
Ahora bien, a su parecer, tener un título no debería ser imprescindible en todos los casos. En relación a las cuidadoras en régimen interino, Fuertes cree que sería muy complicado exigir algún certificado, como plantean los expertos, y que no es adecuado.
De izquierda a derecha y de arriba abajo: Adrià Buzón, CEO de Cuideo; Claudia Gómez, CEO de Senniors; Daniel Ibiza, CEO de Aiudo; Francisco José Rodríguez, CEO de VitalServit; Jorge Cantero, CEO de Cuidum; Oriol Fuertes, CEO de Qida; David González, CEO de Depencare y Álex Lamarca, CEO de Wayalia.
Concretamente, cuenta, en Qida, quienes desempeñan a través de la agencia tareas de apoyo a las Actividades Básicas de la Vida Diaria (ABVDs) como higiene, alimentación y acompañamiento, deben tener obligatoriamente experiencia demostrable de dos años, pero no un título.
“Tenemos que hacer peticiones realistas. En el mercado de personal interino, menos de un 5% cuenta con formación, pero sí cuentan con experiencia comprobable acorde con las necesidades y, por lo tanto, puedes ofrecer calidad de servicio”, indica.
Además, añade, "en el modelo de agencia no es legal que demos formación directa. Así que lo que hacemos son sesiones de información o webinars abiertos a familias (cuidados informales) y cuidadores".
Principales agencias de cuidadores en España: Cuidum, Senniors, Cuideo, Depencare, Aiudo, Wayalia, Vital Servit y Qida.
Falta de profesionalización
Con todo, Fuertes conviene en que el sector debe aún dar grandes pasos para profesionalizarse, puesto que actualmente no todas las empresas tienen el mismo grado de exigencia con los trabajadores que seleccionan.
“Las empresas se están definiendo, es decir, el estándar de calidad está en construcción. En Qida intentamos mantener un nivel muy alto de calidad y exigir la formación acorde a las necesidades del servicio –por horas– o experiencia comprobable y acreditable –personal interino–. Pero si me preguntan hoy si todas las empresas del sector están haciendo las cosas perfectas, pues diría que rotundamente, no. Hay camino para avanzar en la profesionalización a nivel de sector y queremos ser el estándar”, reconoce.
Además, apostilla, las administraciones deben también cambiar para avanzar en la dignificación del sector. “Tenemos una media de unos dos años para conseguir la ayuda para la Dependencia y en el grado III, que una gran parte de personas fallecen antes de llegar a él, sólo reciben 700 euros, lo que da para unas 2 o 3 horas al día. En esta situación, si se hacen las cosas bien, tienes a una persona por horas para las actividades que requieren de mayor especialización con una prestación pública o Ayuda a domicilio privada y luego una el apoyo de una persona en interinaje para apoyo a las actividades básicas de la vida diaria", contextualiza.
Sobre el autor:
Pablo Recio
Pablo Recio es periodista especializado en salud y dependencia, es graduado en Relaciones Internacionales por la Universidad Complutense de Madrid y comenzó su carrera profesional en el diario El Mundo cubriendo información cultural y económica.
Además, fue cofundador de la radio online Irradiando y cuenta con un máster en Gobernanza y Derechos Humanos por la Universidad Autónoma de Madrid y otro en Periodismo por el CEU San Pablo/Unidad Editorial.