El 48 por ciento de los padres en España recurre a aplicaciones de control parental porque están preocupados por el comportamiento digital de sus hijos y quieren vigilarlo. Sin embargo, el 51 por ciento afirma que sus hijos utilizan los dispositivos digitales bajo su propia supervisión y no usan ninguna interfaz restrictiva.
Los niños de hoy en día tienen acceso a dispositivos electrónicos y adquieren experiencia práctica a una edad mucho más temprana, como confirma una reciente encuesta de Kaspersky realizada a más de 11.000 padres y madres de niños de 7 a 12 años en Reino Unido, Francia, Alemania, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Egipto, Malasia, México, Nigeria, Perú, Rusia, Arabia Saudita, Singapur, Sudáfrica, Turquía, Emiratos Árabes Unidos y Estados Unidos.
Sin embargo, es posible que los menores no conozcan todas las normas necesarias para un uso seguro de Internet, ya que sus padres les van enseñando poco a poco, de forma gradual, añade el estudio.
"Debido a que los niños actuales utilizan teléfonos inteligentes y otros 'gadgets' ya desde su primera infancia, perciben el espacio digital como algo natural y familiar, similar a dar un paseo. Y de la misma manera que desde la infancia se enseña a los niños a no comunicarse con extraños o a no ir a lugares desconocidos, el espacio digital también tiene sus propias reglas de comportamiento seguro", afirma la directora de Comunicación de Kaspersky Iberia, Vanessa González.
En este sentido, al regalar un 'gadget' a sus hijos, los padres quieren asegurarse de que estarán seguros en Internet, de manera que la mayoría se esfuerza en supervisar su actividad 'online' para garantizar su seguridad. La mayoría de los padres quiere controlar los vídeos que ven los niños (60 por ciento), los sitios que visitan (56 por ciento) y los videojuegos que usan (52 por ciento). Además, el 49 por ciento de los encuestados muestra interés en limitar el tiempo que sus hijos pasan a diario conectados y usando sus dispositivos.
Para supervisar la actividad 'online' de los niños, más de la mitad habla de hábitos digitales saludables, utiliza aplicaciones de control parental y otro 45 por ciento comprueba su historial de navegación.
Además, el 51 por ciento de los padres afirma que sus hijos utilizan los dispositivos digitales bajo su propia supervisión (42 por ciento) o la de un familiar (9 por ciento). Sin embargo, casi una cuarta parte de los encuestados confía en sus hijos y no los controla de ninguna manera.
Según los resultados de la encuesta, los padres y la familia son los principales responsables de regular el comportamiento de los niños en el espacio digital (87 por ciento). Sin embargo, algo más de una cuarta parte cree que los profesores y las escuelas deben hacerlo, y el 27 por ciento considera que los niños han de ser responsables por sí mismos.
En esta línea, el 90 por ciento de los padres ha hablado de normas de comportamiento 'online' y de la etiqueta digital con sus hijos. Solo una décima parte de los encuestados no aborda este tema con sus hijos.
'Familia segura'
Por ello, desde Kaspersky han puesto en marcha la iniciativa 'Familia segura', con la que ofrecen tanto a las familias como al profesorado información y herramientas para proteger a los más pequeños. Y en el ámbito privado, entienden que hablar y explicar son claves para conseguirlo.
Esto se debe a que los niños pueden no tener conocimientos sobre ciberhigiene y seguridad 'online' en el uso de 'gadgets', y por ello los padres pueden ayudar hablando sobre posibles escenarios con sus hijos y dando ejemplo.
Instalar una aplicación de control parental es una buena idea, pero si se hace, también es importante hablar de ello con los menores y explicarles las razones para que lo entiendan. Igualmente es importante hablar con el menor del problema de exponerse demasiado y de la importancia de la privacidad de sus datos si es muy activo en redes sociales y comparte muchos contenidos, añade la compañía.
