El papa Francisco ha criticado con especial dureza lo que ha dado en llamar “una eutanasia encubierta” ejercida contra las personas mayores a quienes, mantiene, en ocasiones se les administra menos medicación de la que tienen prescrita porque los medicamentos "son caros" y "esto es acortar la vida de los mayores".
Por lo anterior, el santo padre ha pedido a médicos e instituciones católicas que se alejen de la “cultura del descarte" que, dijo, son tanto la eutanasia como la práctica del aborto. “Somos víctimas de la cultura del descarte”, aseguró durante su alocución en la sesión plenaria de la Pontificia Academia para la Vida.
“Está el desperdicio de niños que no queremos recibir, con esa ley de aborto que los envía al remitente y los mata directamente. Y hoy esto se ha convertido en una forma normal, una costumbre que es muy fea y que es realmente un asesinato”, aseguró.
"Material de desecho"
El Papa sostiene que a niños y mayores se les trata “como material de desecho, porque no se necesitan” sin entender, sostuvo, que “son sabiduría, son las raíces de la sabiduría de nuestra civilización y esta civilización las descarta”.
“Tengamos cuidado con esta cultura. No es un problema de una ley u otra, es un problema de descarte”, insistió antes de pedir a “los académicos, las universidades católicas e incluso los hospitales católicos” que no transiten por “el camino del desperdicio”.
Por otro lado, si bien el Santo Padre reconoció la importancia de la lucha contra la covid, también recordó que “en otros continentes, otras necesidades son más urgentes; donde, por ejemplo, no solo faltan las vacunas, sino el agua potable y el pan de cada día".
