Permitir el duelo y buscar apoyo: los consejos de expertos para hacer frente a la viudedad
Se trata de un momento vital acompañado de muchas emociones, como el dolor por la pérdida
La viudedad representa un punto de inflexión profundo en la vida de una persona. Para muchos y muchas, este momento viene acompañado de un torbellino de emociones: el duelo por la pérdida del ser querido, la adaptación a una nueva realidad cotidiana sin su presencia y, a menudo, la reestructuración de las finanzas y la vida social.
Conscientes de todo lo que implica esta situación vital, los y las profesionales destacan, entre sus objetivos, aportar los consejos pertinentes para hacer frente a la viudedad de la mejor manera posible. Este artículo está dedicado a ello: a cómo afrontar la nueva etapa desde el punto de vista psicológico, siguiendo las recomendaciones de los y las expertas.
Cambios y desafíos significativos
Una de las principales cuestiones a tener en cuenta sobre la viudedad es que trae consigo cambios y desafíos significativos. "La pérdida de un cónyuge generalmente desencadena un proceso de duelo, y la persona debe adaptarse a la vida sin su pareja. También implica cambios en las relaciones sociales, ya que la dinámica con amigos y familiares puede cambiar", explica a 65YMÁS Marta Guerra Corral, Psicóloga General Sanitaria del Instituto Psicológico Cláritas. Todo ello sumado a las nuevas necesidades económicas, de gestión del hogar, legales y financieras que puedan surgir.
Por esta razón, "la viudedad puede afectar la salud física de la persona debido al estrés, la falta de sueño y la posible negligencia en el cuidado personal durante el proceso de duelo. Y la pérdida de un cónyuge puede llevar a la persona a reevaluar su identidad y su rol en la vida, especialmente si se había identificado fuertemente como parte de una pareja", añade la psicóloga.
Impacto en las rutinas diarias
Esto hace que la viudedad altere tanto las actividades cotidianas como la manera en que se gestionan las responsabilidades y el tiempo. Guerra Corral apunta a que puede disminuir la motivación para realizar tareas diarias, la capacidad de concentración, así como aumentar los momentos solitarios, por ejemplo, a la hora de comer.
Debido a ello, también puede incrementar la sensación de soledad y aislamiento y, por consiguiente, los problemas de sueño, "ya sea por la falta de la presencia del cónyuge en la cama o por la ansiedad y el estrés del duelo", añade la experta.
Así pues, se trata de un momento vital que afecta tanto a hombres como a mujeres, pero hay diferencias en cómo la experimenta cada uno. Guerra Corral asegura que "algunos estudios y observaciones indican que las mujeres tienden a manejar mejor la viudedad en comparación con los hombres, aunque ambas experiencias tienen sus propios desafíos".
Los problemas psicológicos más comunes, la tristeza y el duelo
Todo lo recientemente expuesto hace de la viudedad un momento vital que puede desencadenar diversos problemas psicológicos. "Entre los más comunes se encuentran la tristeza y el duelo, que pueden evolucionar hacia depresión clínica, caracterizada por una pérdida de interés en actividades, fatiga y sentimientos de inutilidad", menciona Guerra Corral.
También la ansiedad y el trastorno de estrés postraumático (TEPT), en casos de muertes traumáticas, son frecuentes. Además, pueden surgir crisis de identidad y sentimientos de pérdida de propósito, junto con culpabilidad y autorreproches por decisiones pasadas.
Con todo, "enfrentar estos desafíos requiere apoyo emocional y, a menudo, ayuda profesional para facilitar la adaptación y el manejo del duelo", recomienda la psicóloga.
Permitir el duelo y buscar apoyo
Desde el punto de vista profesional, enfrentar la viudedad implica varios consejos clave para manejar este proceso. "Es fundamental permitir el duelo como un proceso natural y buscar apoyo terapéutico si es necesario, junto con mantener conexiones sociales fuertes mediante redes de apoyo y grupos de apoyo específicos para viudos", aconseja Guerra Corral.
Además, es imprescindible cuidar tanto la salud física como mental, establecer nuevas rutinas que proporcionen estructura y propósito, y gestionar de manera adecuada los asuntos prácticos, como los financieros y legales.
"Cultivar la resiliencia, buscar actividades significativas como el voluntariado y mantenerse conectado, utilizando la tecnología para comunicarse con seres queridos, son estrategias adicionales para ayudar a adaptarse y encontrar sentido después de la pérdida del cónyuge", concluye la experta.
