Paula Buedo
Política
Charito, candidata a alcaldesa con 99 años: "Me gustaría ser como Fraga"
Esta vecina de Patones de Arriba volverá a luchar por su medida estrella: un parking para el pueblo
Cuatro años después de su primer intento en las elecciones municipales de 2019, María del Rosario Testa Ruiz, conocida en toda España como Charito, vuelve a la carga para convencer a su pueblo de que la voten como alcaldesa. Una vez más, ella es la candidata más longeva de todo el país: tiene 99 años, pero energía de sobra para afrontar la tarea.
A dos semanas de la cita electoral del 28-M, Charito echa la vista atrás para evaluar estos cuatro años. “Lo recuerdo como si fuera hoy”, ha comentado a 65YMÁS en una entrevista. En los últimos comicios electorales, su candidatura a la cabeza de las Abuelas por Patones llevó la mirada de todo el mundo hacia este pequeño pueblo del norte de Madrid.
Sin embargo, esta legislatura también ha tenido un regusto amargo: no ha conseguido lo que se proponía. A pesar de su incansable trabajo para dotar de un aparcamiento al municipio, para el que cuenta con un estudio realizado por expertos, nadie le ha escuchado. “Te pones rabiosa”, explica.
Ahora, para esta nueva oportunidad del 2023, vuelve a poner sobre la mesa la necesidad de dotar de infraestructuras y mejorar el pueblo que le acogió hace casi 60 años. Vuelve a las urnas acompañada de nuevas compañeras que comparten algunas características: todas rondan los 80, son abuelas y viudas. “Esto último no ha sido una exigencia”, bromean ella y su hijo Enrique.
Para 2023, mantiene su idea estrella de crear un aparcamiento que facilite la visita de los turistas que acuden al municipio, sobre todo los fines de semana. Ahora, con la prohibición de aparcar en el pueblo de arriba, la medida le parece más urgente que nunca. “Se está perdiendo la mitad del turismo”, asegura.
Junto al aparcamiento, hay otros dos aspectos en los que Charito cree que el pueblo podría mejorar. El primero es la necesidad de soterrar el cableado y el segundo la instalación de un aseo público junto a la iglesia para los visitantes.
99 años de experiencia
Charito, bilbaína de nacimiento y madrileña de acogida, lleva viviendo en Patones casi 60 años. Celebró recientemente su 99 cumpleaños y con su enorme vitalidad demuestra que todavía tiene muchísimo que decir y hacer.
Su necesidad de mejorar el pueblo en el que vive la empuja a volver a concurrir a las elecciones, aunque ve muy complicado llegar a alcanzar la alcaldía. “Cuando tienes el cerebro que puedes pensar, ves cosas mal hechas”, asevera Charito, que no duda en señalarlas. La política le preocupa y demuestra que tiene mucho que decir sobre ella: "Me despierto a media noche y pienso en el Gobierno".
Ella no se rinde: quiere ser escuchada. Así lo demostró hace tres años, cuando acudió personalmente a la Comunidad de Madrid para poner sobre la mesa sus demandas. Sin embargo, no ha vuelto a saber nada más de aquella visita. Tampoco ha conseguido poner en marcha su medida. “Sigo esperando que me den respuesta”, lamenta.
“A ver si puedo terminar con esto”, comenta decidida. Su larguísima trayectoria vital, que pasa desde la Guerra Civil hasta la Transición, le permite tener una visión experimentada del mundo. Su vida está repleta de anécdotas que cuenta con precisión y detalles.
¿Cuáles son sus referentes? “Me gustaría ser como Fraga”, responde. A pesar del desencanto general que tiene con la política de todos los signos, Manuel Fraga Iribarne, Fundador de Alianza Popular (AP), ministro de Información y Turismo de Francisco Franco y presidente fundador del Partido Popular, le despierta su simpatía por su papel en la etapa aperturista de la dictadura.
No obstante, Charito quiere cambiar las reglas del juego político. Si Charito llegase a ser alcaldesa, asegura que recibiría y daría el mismo trato a todo el mundo, sin importar su afinidad ideológica. “Atendería a todos bien, sin falsedades”, afirma, en denuncia a las promesas vacías sobre su aparcamiento que ha recibido en estos cuatro años.
Falta de gratitud
Hace cuatro años, todas las miradas se dirigieron hacia Patones de Arriba por la sorprendente iniciativa de Abuelas por Patones. “Es tan difícil que una señora mayor haga un partido político”, asegura Charito. Por ese motivo, la sorpresa se ha extendido más allá de las fronteras españolas. “Aún no he salido del asombro”, añade.
Una de las cosas que atesora con más ilusión en su memoria y corazón es el cariño que ha recibido de personas que le han parado al reconocerla. “Me da sensación de querer vivir”, explica con gran emoción.
Sin embargo, lamenta una falta de gratitud por parte de algunas instituciones. “Nadie me ha dado las gracias”, comenta con decepción y un ligero enfado. A pesar de la movilización mediática y de colocar el nombre del municipio en las televisiones de todo el país, ha sufrido un desagradable desplazamiento.
Ahora, si consiguiese por fin sacar adelante su proyecto, le gustaría que llevase una “plaquita” con su nombre, para que se recuerde su tenacidad y constancia. “Eso solamente les pido”, concluye, con esperanza en esta nueva etapa que arrancará en dos semanas.