Cateterismo: en qué consiste esta técnica que da vida a tu corazón

Los ataques al corazón se sitúan entre una de las principales causas de muerte en España. Por ello, realizarnos un cateterismo a tiempo puede ayudar a diagnosticar y tratar posibles problemas graves de corazón.

Se trata de una técnica imprescindible en pacientes que han sufrido un infarto o una angina de pecho, por ejemplo, y es fundamental en el caso de implantar un stent.

¿Qué podemos ver con un cateterismo?

Al introducir un catéter hasta el corazón, nuestro médico puede valorar, tanto la anatomía de nuestro corazón, como las arterias coronarias. Igualmente, puede ver su funcionamiento (cuánta sangre bombea), medir presiones de las cavidades cardiacas e, incluso, saber si hay alguna válvula alterada.

"Podemos ver si existen defectos congénitos (de nacimiento), como comunicaciones (orificios) en el tabique auricular o ventricular, medir concentraciones de oxígeno en diferentes partes del corazón y obtener muestras de tejido cardiaco (biopsia) para el diagnóstico de ciertas enfermedades", explica el Dr. Juan Vicente Vilar, jefe del servicio de hemodinámica y cardiología intervencionista de Quirónsalud Valencia.

Valoración de las arterias

El cateterismo suele ir acompañado de una coronariografía, una técnica que consiste en inyectar un líquido en el sistema circulatorio que nos permitirá ver, mediante rayos X, las arterias coronarias.

"Con esta técnica podemos ver si existen obstrucciones o estrecheces en las arterias coronarias, su localización exacta, el número de arterias afectadas o la severidad de las lesiones (estrechamientos)", comenta el Dr. Juan Vicente Vilar.

Tanto el cateterismo como la coronariografía son dos técnicas que aportan información muy importante a los médicos a la hora de indicar un tratamiento.

¿Cómo se realiza un cateterismo?

Lo primero es desinfectar la piel de la ingle (si se va puncionar la arteria / vena femoral) o la muñeca (si se va a acceder por vía radial). También se anestesia la zona (anestesia local) desde donde se van a introducir los catéteres, para que el paciente no sufra molestias.

Se introduce un catéter en el torrente sanguíneo a través de una vena o una arteria de la ingle o muñeca y se dirige hasta el corazón. Para controlar el recorrido del catéter por el interior de nuestro cuerpo se utilizan los rayos X.

Una vez en el corazón, se inyecta una sustancia (contraste) para poder hacer visible la sangre con el equipo radiológico y poder así estudiar el movimiento de las paredes del corazón, su tamaño, posibles alteraciones en las válvulas cardíacas y existencia de orificios anormales.

Todo el proceso se graba en una película para su posterior análisis y estudio.

"El paciente puede sentir palpitaciones provocadas por el paso de los catéteres. Durante la inyección del contraste puede notar calor o sofoco, pero esas sensaciones son pasajeras. Las complicaciones de la exploración son muy poco frecuentes, destacando problemas locales en el lugar del acceso vascular", sostiene el Dr. Vilar.

Una vez finalizado el procedimiento se extraen los catéteres que se habían introducido. En los casos en los que el procedimiento se haga por vía radial (más del 90% de procedimientos), al paciente se le dejará un manguito en la muñeca que será el encargado de comprimir la arteria para que no exista sangrado.

Si la técnica se ha hecho por la arteria de la ingle, se realizará o bien maniobras de compresión femoral con posterior vendaje compresivo durante unas horas, o la utilización de dispositivos hemostáticos que facilitaran una deambulación más precoz del paciente, así como, un aumento de la seguridad del procedimiento (menor número de hemorragias).

En los cateterismos diagnósticos realizados por acceso radial (la mayoría de procedimientos) el paciente es dado de alta al domicilio a las pocas horas del procedimiento. Cuando se implanta un stent al día siguiente, salvo en los casos de infarto agudo de miocardio, en los cuales, el paciente permanece  ingresado en el hospital durante varios días.

Implante de stents

La mayoría de los cateterismos se realizan para la implantación de stents (muelles) en las arterias coronarias.

"Los stents son dispositivos metálicos de diferentes diseños que se introducen en las arterias coronarias y actúan apuntalando su pared. De esta forma se evita la oclusión o cierre brusco de la arteria posterior", explica el especialista de Quirónsalud.

El stent está indicado en pacientes con infarto agudo de miocardio (con angioplastia primaria) y en cualquier manifestación de la cardiopatía isquémica (angioplastia electiva). Actualmente en España se colocan al año más de 100.000 stents, de los que entre el 20% y el 25% se realiza tras un infarto de miocardio.

"Los stent son dispositivos muy eficaces y seguros, con un porcentaje muy bajo de complicaciones para el paciente, siguiendo las instrucciones aconsejadas por su especialista en cardiología", concluye el Dr. Juan Vicente Vilar.